La nariz es una parte clave en la cara. Muchas personas tienen complejo e inseguridad que está torcida, tiene caballete, etc. La salida más fácil es la rinoplastia que puede hacerse superficial o interior y superficial con fin estético y médico. Pero… ¿existe algún otro sistema sin necesidad de pasar el quirófano?
El problema es que hay que pasar un quirófano y eso produce cierto rechazo. Y… ¿si les dijese que hay una técnica sin cirugía con resultados espectaculares? Efectivamente, el Centro Insted ofrece la Rinomodelación.
Este Centro brinda la posibilidad de remodelar la punta de la nariz, quitar una giba o mejorar los ángulos entre la nariz y el labio superior. Se trata de una técnica Médico Estética que consiste en el desplazamiento de los segmentos nasales mediante la cuidadosa introducción de materiales, en puntos específicos de la nariz.
Con pequeños pinchazos se aplican los materiales de relleno directamente en la nariz en estrecha proción con la armonía del rostro, ejerciendo en diferentes puntos un levantamiento mecánico. Lo que produce un cambio inmediato y sustancial en la forma y angulatura de la nariz.
¿El resultado? Se consigue una nariz respingona o sin caballete. Esta novedosa técnica constituye uno de los avances más efectivos dentro de la Medicina Estética, ya que en el 80% de los casos, las intervenciones de Rinoplastia pueden resolverse gracias a la Rinomodelación, sin olvidar que no se trata sólo de corregir, sino de armonizar la forma y las prociones de la nariz con el resto del rostro.
El tratamiento suele realizarse en un margen de 1 a 3 sesiones que duran aproxadamente 30 minutos y sus resultados son inmediatos. El paciente puede volver de inmediato a su vida habitual sin necesidad de baja médica ni reposo puesto que el tratamiento no precisa de cuidados externos.
Los precios de este tratamiento dependen de la cantidad de producto que se necesite, pero oscilan a partir de 400 euros.