A partir de ahora, los ciclomotores tendrán menos facilidades para librarse de las multas. El Ayuntamiento de Barcelona está instalando nuevos equipos de cámaras para controlar las infracciones cometidas especialmente este colectivo.
De hecho, el consistorio ha informado que una de las cámaras ya funciona en fase de pruebas y que se encuentra en el cruce de la calle Aragó y paseo de Grácia. El resto, siete, se colocarán teniendo en cuenta varios puntos negros localizados gracias a un estudio realizado el RACC durante el mes de noviembre. Concretamente, se situarán en los cruces de Diagonal con Aribau, Balmes y paseo de Gràcia; en avenida de Roma con Comte d’Urgell; en Muntaner con Aragó, y en el cruce de Gran Via con Aribau.
Estos nuevos equipos están dirigidos especialmente a este colectivo de dos ruedas. Y es que, aunque también detecta al resto de vehículos, su calidad permite ‘fichar’ a los ciclomotores más zigzagueantes.
El ayuntamiento dispone ahora mismo de diez cámaras que pueden funcionar en treinta cruces de la ciudad y que ofrecen una agen muy precisa de la infracción debido especialmente a la secuencia de movientos correlativos en un campo de visión de todo el cruce.
Al respecto, se ha dado a conocer que el Ayuntamiento ha tenido que invertir 258.925 euros en este proyecto, cuyo objetivo final es la seguridad vial.
