Los micrófonos han complicado el trabajo a los diputados de la Asamblea de Madrid. Prero que los micrófonos estaban encendidos y se escuchaba tanto al diputado de turno como a los comentaban las respuestas del partido contrario.
Ante un pleno ordinario de la Asamblea de Madrid muy agrio, los micrófonos han puesto el tono amable al acto. La presidenta de la Asamblea, Elvira Rodríguez, ha tenido que intervenir en varias ocasiones, y no sólo para recordar a los diputados que su tiempo ha terminado, sino para conseguir que a cada uno de los diputados que tenían que intervenir se le escuchara con claridad. Nada más comenzar el pleno, los problemas con los micrófonos parecía ser que se quedaban abiertos, lo que pedía que se escuchase con claridad a los diputados que tenían que intervenir. Por lo que Elvira Rodríguez ha tenido que pedir a los diputados que cerrasen sus micrófonos.
Momentos después la consejera de Educación ha tenido que acercarse mucho al micrófono, ya que el agua pedía que se recibiese bien el sonido. Posteriormente, Juan José Güemes, consejero de sanidad de la Comunidad, ha tenido que sustituir su micrófono uno inalámbrico.
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