Reducir la velocidad en las ciudades es uno de los puntos clave del Plan de Seguridad Vial urbano que, ejemplo, ha acogido Soria. Se trata de un plan tipo que podrán poner en marcha las ciudades y municipios para reducir el número de accidentes de tráfico. Entre las propuestas hay que destacar la elaboración de mapas de ‘puntos negros’ con las calles que registran un mayor número de siniestros o reducir la velocidad en algunas vías a 30 km/h.
Los accidentes de tráfico en la ciudad se han reducido en menor medida que los siniestros que tienen lugar en la carretera. Tal y como daba a conocer el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, mientras que en las vías se reducía un 45% el número de fallecidos entre 2003 y 2008, en los municipios el descenso era del 31%. En este sentido, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha elaborado un plan tipo de seguridad vial que servirá a las ciudades y municipios para poder reducir aún más esta cifra.
La medida, presentada y aplicada en Soria, se extenderá a diez ciudades: Ávila, Córdoba, Gijón, Granada, Guadalajara, Fuenlabrada, Cudillero, Puertollano, Mérida y La Laguna en la segunda fase de este proyecto que concluirá con la realización de un catálogo que sirva de modelo para el resto de ciudades españolas.
El plan en cuestión tiene cuatro objetivos. Por un lado, reducir el número de atropellos de personas mayores y niños, disminuir la plicación de conductores jóvenes en accidentes de tráfico, reducir los puntos de concentración de accidentes y, otro, mejorar la recopilación y transmisión de los datos relacionados con la circulación.
En este sentido, se plantea la posibilidad de elaborar mapas de ‘puntos negros’ en aquellas calles que registren una elevada siniestralidad y la idea de contar con un registro estadístico de los accidentes municipales para poder contar con una base de datos única donde se incluyan todos los datos de siniestralidad vial urbana. Igualmente se apuesta jerarquizar las vías y litar la velocidad a 30 kilómetros hora en las calles de origen o destino, no de tránsito.
Entre las medidas que mirarán reducir la velocidad se encuentran la plantación de rotondas, semáforos, elevaciones en la calzada, badenes, bandas sonoras… Igualmente se buscará que los conductores no aumenten la velocidad cuando crucen una intersección antes de que el semáforo se ponga en rojo. Con esta medida se apuesta también facilitar el paso de las personas con movilidad reducida y una mejor convivencia entre los diversos modos de transte.
Por últo, se insta a crear caminos seguros y a la elaboración de planes de actuación en caso de accidente, así como se incide en la necesidad de mejorar la señalización urbana. De esta forma, la seguridad vial se convertirá en un tema de prioridad también para las ciudades y municipios de España.
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