- La vicepresidenta prera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, mantuvo una reunión con el comité de intercentros de EFE el pasado miércoles en la que mostró su apoyo a los trabajadores y les garantizó el empleo hasta 2012.
Según fuentes de los trabajadores consultadas prnoticias De la Vega mostró el apoyo del Gobierno a los trabajadores de la agencia EFE y garantizó que el Ejecutivo mantendría el empleo de toda la plantilla hasta 2012. Aunque eso sí, reconoció que era necesario ajustarse el cinturón y hacer algunos sacrificios.
El comité le trasladó a la vicepresidenta su disconformidad en cuanto a que los trabajadores tengan que sufrir las consecuencias de una mala gestión económica mientras que los directivos siguen recibiendo bonus aún cuando la empresa tiene pérdidas. De la Vega se comprometió a trasladar estas quejas a Álex Grijelmo y Lola Arocha, según fuentes de los trabajadores.
Tras el encuentro con María Teresa Fernández de la Vega, el comité de intercentros celebró una reunión interna para más tarde volver a sentarse a dialogar con la empresa la tarde de ayer, a falta de menos de una semana para que se celebre el referéndum que decidirá si los trabajadores aceptarán la rebaja del 4,5% del salario o si el contrario irán a la huelga el próxo día 23.
La últa propuesta de la empresa de la empresa consiste en un recorte salarial del 4,5% a cambio de no elinar los pluses de jornada y no abordar cambios en los horarios. En un principio ante la negativa de la plantilla a aceptar una rebaja salarial la agencia planteó la elinación del 90% de los pluses de jornada, cosa que afectaría a 570 trabajadores que pasarían a cobrar entre un 6% y un 9% menos. Los representantes de los trabajadores mostraron un claro rechazo a estas medidas y la respuesta del equipo de Grijelmo fue contundente: puso sobre mesa 30 despidos.
Ante la falta de acuerdo, la directiva tomó la decisión de acometer estos cambios de forma unilateral, lo que ha causado un fuerte choque entre sindicatos y empresa. El próxo 14 de abril se someterá a referéndum la últa propuesta de la empresa, y los representantes de los trabajadores esperan que la dirección respete la decisión de la plantilla si se niegan a aceptarla, de lo contrario irán a la huelga el día 23.
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