La policía municipal ha detenido a más de 300 personas conducir bajo los efectos del alcohol durante el mes de febrero en Madrid. De hecho, 122 de ellas se produjeron tras sufrir algún tipo de accidente.
Así lo revelan las estadísticas del Ayuntamiento, donde figura que se realizaron 9.552 pruebas de alcoholemia, de las que 392 resultaron positivas. Igualmente, 9.145 dieron negativas y quince conductores se negaron a realizarlas.
En lo que se refiere a los controles que se llevaron a cabo algún tipo de incidente, 102 conductores conducían ebrias, mientras que 91 no llegaron a superar el límite permitido y siete que no habían bebido.
Igualmente hay que destacar que de las 1.172 personas detenidas en la capital durante ese mes, 381 fueron delitos contra la seguridad vial.