A pesar de que la industria TIC está menos sujeta a la necesidad apremiante de las ayudas públicas, a diferencia de lo que ocurre con otros sectores, y cuya prosperidad no está vinculada a los fondos oficiales, el retraso en la plantación de la sociedad digital respecto a las economías competidoras requiere de una apuesta decidida parte de los poderes públicos ‘un reto que podría correr riesgos si la reducción de personal y el ahorro de costes se centra en la I+D+i’ se señala desde la organización empresarial, añadiendo que ‘el gasto en I+D+i en España es apenas el 1,62% con respecto a los países de la OCDE’.
En este sentido, desde ANEI se reconoce cierto liderazgo español en la aplicación de las tecnológicas en ámbitos tales como la administración digital o la plantación del DNI electrónico, pero recuerda la reciente merma de las partidas presupuestadas para el Plan Avanza ‘la decisión de supresión de la Dirección General de Sociedad de la Información, no se puede definir en este escenario de meramente sbólica’
La patronal denuncia el agravio comparativo para con un sector estratégico mientras que hay otras ayudas que se mantienen en áreas menos trascendentales para la economía, lo que resulta difícil de entender especialmente tras la reciente Declaración de Granada, suscrita el gobierno español, en la que se destacaba que la Unión Europea debe hacer una reflexión en profundidad sobre las TIC como factor esencial para el creciento económico, la creación de empleo, la sostenibilidad y la integración social.
ANEI teme que la economía digital se convierta en la vícta propiciatoria de la reducción de inversiones públicas después de haberlo sido en las cuestiones regulatorias ‘a menudo mal enfocadas y resueltas’, en alusión a la reciente Ley de economía Sostenible (LES) y su polémica disposición final.