Hace unas semanas me presentaron a una mujer cuyo conociento y visión de futuro de su negocio me cautivaron desde el prer momento. Me habló de la marca y su tancia. Me demostró que la marca es algo fundamental para cualquier empresa, y si trabajamos con Intet mucho más. Se trata de María Millán, fundadora y directora general de Sum@consulting (www.sumaconsulting.com). Una mujer emprendedora que en dos horas me dio una verdadera lección en cuanto al desarrollo de marcas se refiere, sobre todo enfocado a las pequeñas y medianas empresas. Lo prero que me dejó claro es que una marca se construye en tres pasos. Y mucho que yo abría los ojos, casi incrédulo, ella consiguió demostrarme que el prer paso no es, ni mucho menos, la comunicación. Claro, nosotros los periodistas y los que regentamos agencias de comunicación creemos que es lo prero, y resulta que no. Es parte de esa mala costumbre que tenemos de mirarnos el ombligo.
Maria Millán me enseñó que lo prero es pensar que el negocio nace para dar vida a una idea. Y el prer paso es, lo tanto, recuperar la idea la que empezó ese negocio, y definirla de manera sólida, clara y concisa. En este prer paso hay que responder a preguntas como ¿ qué se está creando este negocio?, ¿ qué sus productos son como son? y ¿qué valor diferencial atan? Es esencial definir con total nitidez nuestra visión de ese negocio, para que sepamos claramente el camino que debemos seguir y no desviarte en ningún momento.
Y ella tiene tan clara la visión del suyo, que en los próxos tres años pretende haber ayudado a posicionar a 50 empresas con presencia en Intet, como líderes en sus mercados. Y es seguro que lo va a lograr, sobre todo que tiene claro el objetivo y los medios que debe utilizar para conseguirlo. Me comentó que esta visión dirige cada paso su empresa, y le ayuda a filtrar todo lo que hace. Si se le ocurre algo que no esté en línea con esta visión, lo descarta tajantemente. Y eso es lo que enseña a sus clientes. Predica con el ejemplo.
Cuando la visión de empresa es sólida, es el momento de dar el segundo paso en la creación de la marca, que consiste en transformar esta idea, para comunicarla como una experiencia deseable, que permite que la gente te conozca y te reconozca cada vez que entra en contracto con tus productos y servicios.
Y llegamos así al tercer paso, que es el proceso de creación de la marca, muy complejo, cierto, que establece cómo se va a gestionar cada uno de los elementos de g. Pero si los dos pasos anteriores están bien dados, todo irá sobre ruedas. Al final, lo que consigues es un círculo virtuoso para tu negocio, que cada paso que das refuerza el valor tu marca, y te ayuda a vender más. ¿Sencillo? Sí, pero hay que saber hacerlo. Menuda lección aprendí en dos horas. Y me salió gratis.
JUAN MANUEL ROMERO MARTÍN, ADICCIONES DIGITALES
