- Los diarios han vuelto a confirmar su hoja de ruta: persecución a Google, continúan los anuncios de prostitución, piden plantes de ayuda a la lectura de prensa y solicitan formación en nuevas tecnologías para los periodistas. El problema es que el Ejecutivo nuevamente ha hecho oídos.
Lo han dicho de todas las maneras posibles: con amenazas, con jornadas, con reuniones, con ultátums y ahora con la Declaración de Madrid, una serie de demandas que han reunido las solicitudes de todos los sectores mediáticos y que ha sido hecha pública en formato de manifiesto hace ya casi una semana. Como pocas veces la AEDE (prensa), UTECA (televisión) y la AERC (radio) han apoyado un documento en conjunto, pero como ya viene siendo habitual el Ejecutivo nuevamente ha hecho oídos sordos de las demandas.
- La FIP se desmarca de la Declaración de Madrid (INCLUYE LA DECLARACIÓN DE MADRID
En esta declaración y como ya os hemos contado se incluían declaraciones de intenciones básicas que los editores vienen pidiendo desde hace meses: la principal es la solicitud casi desesperada de la Tasa Google para que el buscador pague a la AEDE la agregación de contenidos de sus diarios. La segunda reivindicación ha venido de manera más plícita y apunta a una autorregulación de los contenidos publicitarios, es decir la libertad de poder publicar anuncios de prostitución sin tener al Ministerio de Igualdad fiscalizando los avisos de contactos.
El resto son las demandas conocidas y tienes que ver con la distribución equitativa de la publicidad de las administraciones locales, planes de fomento a la lectura y el consumo de medios y ayudas a la UE para que los periodistas analógicos se puedan reconvertir en digitales. La Radio también elevó la voz en la Declaración de Madrid pidiendo que de una vez se lpie el espectro radioeléctrico y se cierren las emisoras piratas. Demandas que además lograron el apoyo de la FAPE, pero no de la Federación Internacional de Periodistas (FIP).
¿Y ZP? Se comprometió a mirar el documento, pero como era de esperar no ha mostrado ninguna voluntad de ponerlo en marcha. Hace unas semanas os contamos que debido al plan de austeridad pulsado hace unas semanas, los editores se quedaban sin posibilidad alguna de obtener subvenciones. Y con todo el lío legislativo y las medidas anticrisis, es casi posible tener un equipo en Moncloa trabajando en este paquete de demandas.
Lo más probable es que los editores de prensa tengan que seguir esperando ese paquete que esperan como agua de mayo. Mientras, algunos diarios como El Mundo prefieren ir libre y acercarse a Zapatero su propia cuenta. Público hace lo suyo y El País está alerta. Lo cierto es que los diarios siguen cuesta abajo y los datos económicos y de difusión reflejan que este año tendrán muy difícil empezar a repuntar.
Seguiremos informando…
