30/07/2010 En lo que va de año han sido asesinados en Honduras siete informadores. El Gobierno ha minizado los hechos.
La lentitud con la que el Ejecutivo de Porfirio Lobo investiga los crímenes contra periodistas y la falta de arrestos desvelan una situación alarmante en opinión del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).
El consultor del CPJ Mike O’Connor relata que ‘los asesinatos ocurrieron en una atmósfera cargada de violencia e ilegalidad. Las constantes fallas del gobierno para investigar en forma exitosa los crímenes contra periodistas y otros críticos –ya sea falta de voluntad, potencia o incompetencia han creado un cla de consolidada punidad’.
El informe elaborado el Comité concluye que las víctas en al menos tres casos fueron asesinadas en represalia su periodismo crítico, mientras que el trabajo de los periodistas también podría haber sido un factor determinante en los restantes crímenes. En un caso, el gobierno ignoró una directiva de la Organización de Estados Americanos de procionar protección a un retero en riesgo que posteriormente murió acribillado.
Para acceder al informe, pinche aquí.
