Fue a mediados de los años 50 del pasado siglo cuando el científico británico Robert Edwards se dio cuenta de que la fertilización fuera del cuerpo humano podía ser la solución al problema de la infertilidad. El desarrollo de teorías en este campo fueron la base de uno de los acontecientos más tantes de la medicina moderna del siglo XX, el naciento del prer niño probeta en 1978, el famoso Louise Brown.
Los responsables de la elección de Edwards como ganador del Nobel de Medicina han destacado la relevancia de sus teorías e investigaciones en la fertilización in Vitro con humanos, ‘uno de los descubrientos más tantes de la medicina moderna‘.
Edwards sentó las bases de la teorías sobre la fertilización in Vitro en humanos y las terapias sobre infertilidad que durante décadas él mismo y numerosos científicos han trabajado. Hasta el día de hoy, más de cuatro millones de personas en todo el mundo han sido concebidos gracias a esta técnica. La técnica desarrollada Edwars es la solución para un 10 ciento de las parejas que se esta hay en el mundo que no pueden concebir un niño métodos naturales.
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