Si los Padres de la Constitución y quienes han contribuido y contribuyen a que España sea el país en el que quepamos todos, se hubieran preocupado de cuales son nuestras fobias, seguramente se hubieran ahorrado muchos disgustos y discusiones estériles. Ayer, cuando el Tribunal de Justicia de la Union Europea dictó sentencia sobre el tema del canon digital del que se beneficiaba la muy caritativa Sociedad General de Autores, una explosión de alegría se extendió toda la piel de toro. que fue recogida casi instantáneamente todos los medios de comunicación con un entusiasmo fácilmente perceptible. Nunca el batacazo de una institución había provocado un entusiasmo tan generalizado. Incluso muchos compositores se alegraron del notición del día. O sea, que para vertebrar España, además de la Constitución, los Estatutos y todas cuantas leyes nos hemos dado en la Democracia, habría que añadirle el cierre de la SGAE, la manifiesta anadversión que le tenemos todos los españoles sus haceres y sus decires. Si lo consiguiéramos, seríamos mucho mas felices y hasta estaríamos dispuestos a conseguir la creación de otro organismo mas democrático que defienda realmente los derechos de los autores de este país, sin que los demás sintamos rechazo alguno.
Manuel Fernando González
Editor y Director