‘Hemos registrado unos resultados que resisten en el actual entorno’, asegura Ángel Cano, consejero delegado de BBVA durante la presentación de resultados correspondientes al tercer trestre de 2010. Así, el banco ha obtenido durante estos preros nueve meses del año un beneficio atribuido de 3.668 millones de euros (12,2%), ganando cuota de mercado en todas sus franquicias. VIDEO.
Cuatro son las características fundamentales que presentan estos resultados. Según Cano, la recurrencia y solidez de los ingresos, gracias a un modelo de negocio centrado en la relación con los clientes; mejora en los indicadores de riesgo; capacidad de generación orgánica de capital y fortaleciento de la estructura de balance.
En este sentido, se ha hecho hincapié en la capacidad del Grupo para generar ingresos de manera recurrente. Así, el margen de intereses de enero a septiembre ascendió a 10.182 millones de euros, un te silar al registrado en el mismo periodo del año anterior. Además, las comisiones acumuladas en el ejercicio – tanto las ligadas a los servicios bancarios como a la gestión de fondos – aumentan un 4,1%, hasta €3.402 millones.
Por otro lado, el margen bruto generado el Grupo hasta septiembre ascendió a 15.964 millones de euros, un 3,8% superior al del mismo periodo del año anterior. Además, los gastos de explotación de BBVA en el periodo eneroseptiembre aumentaron un 8,8%, hasta los 6.642 millones de euros, debido, entre otras razones, a las inversiones que está acometiendo el Grupo en sistemas, en el aumento y renovación del parque de cajeros, así como en los distintos planes de creciento puestos en marcha en todas las geografías en las que opera.
Por otro lado, destacar que el ratio de eficiencia del Grupo cerró septiembre en el 41,6%, registrando el margen neto acumulado un comtamiento positivo y ascendiendo a 9.322 millones de euros (+0,5%).
El segundo aspecto destacado la compañía ha sido el fortaleciento de los principales indicadores de gestión. En prer lugar, hay una mejora de los indicadores de la calidad del riesgo – entradas brutas en mora y recuperaciones – que se traduce en una estabilización de los saldos dudosos. Igualmente, se produce una mejora en la tasa de morosidad (4,1%, frente al 4,3% de diciembre de 2009) y la cobertura sube cinco puntos centuales desde diciembre, hasta el 62%.