Ese hombre se ha vuelto loco, pero loco de manicomio. Ese hombre es ya un enfermo y un drogata, que necesita pincharse tres veces al día para seguir pensando que lo está haciendo bien. Ese hombre es ya un peligro nacional. Ese hombre ha perdido el norte y sólo piensa lo de Séneca, que “el Poder a cualquier precio jamás es caro” (pero, sin saber que esas palabras las escribió el cordobés dedicadas a la emperatriz Agripina cuando la ambiciosa ya se había cargado al heredero legíto (Germánico) y al propio emperador (Claudio) su marido, para hacer emperador a su hijo Nerón. Ese hombre está hundiendo al PSOE (y como los suyos le mantengan un año más los socialistas desaparecerán de las urnas…¡ya se verá en Cataluña¡) y lo más grave: se está cargando a España. Prero traicionó a los nacionalistas catalanes. Luego traicionó a la clase obrera y a los sindicatos. Días más tarde vende su alma a los nacionalistas vascos. Compra a los canarios. Engaña a los andaluces. Se va de una guerra y se mete en otra peor. Se ha comido todos los fondos del Estado y ha hipotecado a dos generaciones de españoles. Y últo va a salvar a eta y su entorno abriéndoles las puertas del dinero. (Y el loco se cree eso del “adiós a las armas”,como si desconociera ese refrán tan español de “prometer hasta meter” y luego si te vi no me acuerdo). eta no parará hasta conseguir lo que quiere: una Euskadi independiente con Navarra y la Rioja incluídas).
¿Y qué se puede hacer con un Jefe de Gobierno que se ha vuelto loco? Ese es el problema. La única vía sensata es la de su propio Partido, que le digan hasta aquí has llegado y a León. Pero, nadie querrá suicidarse, que el candidato socialista que se presente morirá en las urnas. ¿El Jefe del Estado?. Constitucionalmente sólo es “moderador” (gran error de los padres de la Constitución del 78, pues ni la República le quitó al Presidente el poder de convocar elecciones cuando lo creyera otuno). ¿Una moción de censura? Sería lo políticamente correcto si no fuese un enfermo y estuviese dispuesto a comprar los votos que necesite para salvarse. Ahora algunos se han tranquilizado el nombramiento del sibilino Pérez Rubalcaba ( cierto, que eso que ha dicho de que el conoce lo de todos, no es muy original). Fue Fouché,el verdadero Fouché, el que a alguien que le preguntó qué había sido Ministro de la Policía con todos le respondió: que me temen, que yo conozco la vida de todos mejor que ellos mismos. Si hasta le estuvo pagando un sueldo mensual a la emperatriz Josefina para que le contara los secretos de alcoba), pero ni así se arregla esto. Hay que declararle incapacitado y eso lo tienen que hacer los médicos.
