Un 5,7 sobre 10 es la puntación que los consumidores madrileños dan a las empresas de telefonía, según el Barómetro de consumo del consistorio de la capital.
Esta puntuación deja entrever que existen aspectos, en particular los relacionados con la protección del consumidor, que son susceptibles de mejora. Es decir, la percepción del usuario es que las empresas hacen más captar clientes que mantenerlos.
El estudio indica que los servicios de telefonía son usados la práctica totalidad de los madrileños: un 87,8% de los hogares declara tener teléfono fijo; un 90,2% teléfono móvil, y un 60,1% tiene instalado acceso a Intet. Por tramos de edad, la telefonía fija pierde peso, solamente un 70,8% de los menores de 30 años afirma tener teléfono fijo, pero la presencia del móvil es total, del 100% y la de Intet crece hasta el 77,5%.
Curiosamente Intet es el servicio en el que más se solicita cambio de proveedor (10,7%), normalmente para aprovechar una rebaja de precios obligada a mejoras del servicio como puedan ser el ancho de banda o la velocidad de acceso. El cambio de proveedor en la telefonía fija (8,7%) también va unido en muchos casos a cambios de proveedor de Intet, mientras que en el caso de la telefonía móvil están ligados a cambios de precios o mejora de utilidades o servicios en la propia telefonía móvil.
Con el objetivo de mejorar la defensa de los consumidores, el ayuntamiento de Madrid ha firmado recientemente acuerdos con diversas operadoras de telefonía para la gestión de las reclamaciones que reciben las Oficinas Municipales de Información al Consumidor y las Juntas Arbítrales de Consumo.
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