La mitad de los usuarios circula con una incorrecta presión de inflado y un 19% lo hace con la profundidad del dibujo debajo del míno legal. Así lo revela un informe realizado el RACE y Goodyear. La crisis se sitúa como una de las principales causas que ha provocado que cambiemos menos nuestros neumáticos. De hecho, desde el año 2007 sus ventas han descendido un 11% en España, mientras que en Europa crecen un 7,3%.
Tanto el RACE como el fabricante Goodyear han revisado el estado de los neumáticos de casi 3.500 turismos durante los meses de julio y agosto. ¿El resultado? La mitad de los vehículos circula con una presión incorrecta, de los cuales, un 57% de los casos fue llevar una presión inferior a la indicada, y un 43% un exceso de presión. Por otro lado, el 19% circula con la profundidad del dibujo debajo del míno legal de 1.6 mm, lo que supone un grave riesgo para la circulación.
Durante el año 2009 se produjeron en España 158 accidentes con víctas relacionados con problemas con los neumáticos (dibujo muy desgastado, pinchazos y reventones o pérdida de la rueda), lo que supone un aumento del 7,5% con respecto al año 2008, y de un 14% respecto al 2007. Ante los datos obtenidos, tanto el club de automovilistas como el fabricante de neumáticos alertan de que este problema puede agravarse con la llegada del invierno y el empeoramiento de la clatología, lo que puede provocar un aumento del riesgo de pérdida de adherencia y, tanto, de accidente.
Si extrapolamos los resultados obtenidos al parque circulante de turismos existente en España, cerca de 11 millones de turismos estarían circulando con una presión incorrecta, y más de 4 millones con una profundidad de la huella del neumático debajo del míno legal.
Hay que destacar que la falta de manteniento y la circulación con el dibujo debajo del límite legal establecido de 1,6 mm provocan un aumento del riesgo, especialmente durante la época invernal, ya que la distancia de frenado sobre suelo mojado se multiplica tres con un neumático con el dibujo gastado. Como ejemplo, a 100 Km/h sobre suelo mojado el área de contacto con la carretera baja de un 77% con el neumático nuevo, a un 5% si está gastado, lo que aumenta el riesgo de accidente salida de vía o pérdida de control del vehículo.
