Todo aquel que piense o sueñe que el régen totalitario de La Habana está haciendo cambios es un iluso o un tonto de capirote. Nada más hay que ver como de nuevo Las Damas de Blanco han sido repridas, arrastradas las calles de la capital cubana y ofendidas personas, si es que se les puede llamar así a quienes hacen de la ofensa intrasingente su modo de vida o la utilizan para esconder cuanto llevan de amoralidad escondida en lo más profundo de su alma.
Para los gobernantes cubanos el disentir de su discurso doctrinario y autosuficiente es atentar contra la patria. Es el mismo discurso de hace más de 50 años cuando tomaron el poder asalto. Es más de lo mismo. No han cambiado ni van a cambiar en lo más míno. Son incapaces de cumplir lo acordado, aunque lo pactado sea con el diablo. No pueden cumplir que ellos son el diablo personificado. Por eso aún mantienen tras las rejas, como rehenes a 11 luchadores la democracia y la libertad. Prisioneros de conciencia que jamás han proferido una amenaza o un insulto contra ninguno de los intocables de la jerarquía política cubana. Pero eso, también arremeten contra las Damas de Blanco, mujeres indefensas cuyo único delito es pedir la libertad, inmediata e incondicional, de sus seres queridos presos injustamente desde la Pravera Negra del 2003 en Cuba querer una patria libre, justa, democrática, ‘Con todos y para el bien de todos’ como soñara nuestro José Martí.
Nadie desea que nuestras esposas, madres, hermanas e hijas sufran el acoso, la represión y el ataque de las turbas mal intencionadas y enviadas los agentes de la Seguridad del Estado Cubano, que supuesto actuan mandadas el máxo gobernante cubano, Raúl Castro, pero lo ocurrido este 10 de diciembre en las calles de La habana, 62 aniversario de la instauración de la Declaración Universal de los Derechos Humanos la Organización de Naciones Unidas, es una muestra de que a los gobernantes cubanos no les ta, en lo más míno la opinión pública internacional y mucho menos su pueblo.
Nuevamente la Iglesia Católica Cubana ha sido burlada y menospreciada los hermanos Castro. Una vez más quienes tiranizan al sufrido pueblo cubano hacen caso omiso de las peticiones de la ONU y de la Unión Europea, y se rien de José Luis Rodríguez Zapatero y del gobierno de España, quienes se han convertido en garantes a ultranza del totalitarismo cubano ante el Parlamento Europeo. Era de esperar el ridículo del presidente español. Los Castro solo han utilizado a los actuales gobernantes españoles para tratar de mantenerse en el poder.
Ante este nuevo y cobarde ataque contra las Damas de Blanco nuestro respeto y admiración su heroismo y su fe inquebrantable, su lucha pacífica y silenciosa en defensa de la democracia y la libertad para Cuba y todos los cubanos. Sin duda alguna son merecedoras, desde ahora, del Premio Nobel de la Paz en el próxo año 2011. Gracias cuanto hacen y han hecho un mundo mejor.
JULIO CÉSAR GÁLVEZ
Periodista
Exprisionero de conciencia cubano del Grupo de los 75
