16/12/2010 PRLATAM 102.839 SUSCRIPTORES El País publica hoy una nueva entrega de los cables de Wikileaks, en los que se revela ‘el secreto mejor guardado de Cuba’, las razones que obligaron a Fidel Castro a alejarse del poder.
Los documentos, pertenecientes a la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, aseguran que el ex presidente cubano sufrió en julio de 2006 una hemorragia intestinal a bordo de un avión que cubría la ruta entre Holguín y La Habana y que obligaron a un aterrizaje de urgencia y el posterior ingreso hospitalario de Castro. Los cables informan también de que el ex guerrillero se negó a que se le practicase una colostomía (abertura en la parte exterior del abdomen para elinar heces hasta que sane el colon) y que pidió que cortaran la parte infectada y empalmaran el intestino al colon. ‘Con el paso del tiempo, y al haberse infectado el colon, la operación falló y la parte empalmada se separó. Tuvieron que operarle de nuevo, pero se toparon con una fístula (una conexión anormal entre dos órganos), cuya existencia desconocían’. Para tratar la fístula utilizaron, sin éxito, un aparato fabricado en Corea y, posteriormente, llamaron al médico español, José Luis García Sabrido, jefe de Cirugía del hospital Gregorio Marañón de Madrid.
De esta manera, Wikileaks saca a la luz las circunstancias y características de la enfermedad del ex líder cubano que ha sido secreto de Estado durante años. Fidel Castro estuvo ingresado en el Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas (CIMEQ) durante dos años, permaneció meses conectado a sondas y perdió alrededor de 18 kilos. Las informaciones publicadas El País afirman que ‘a la edad de Fidel Castro la enfermedad no es curable, según el informe, y no le permitirá volver a la cúspide del mando activo en Cuba’. ‘No morirá inmediatamente –explican los cables, pero progresivamente perderá sus facultades y se debilitará más hasta que sobrevenga el falleciento’.
La Sección de Intereses de Estados Unidos concluyó: ‘El informe es consistente con nuestra propia evaluación de que probablemente Fidel Castro casi se muere en julio y octubre de 2006 (…) nos faltan demasiadas variables para predecir cuantos meses más vivirá Fidel Castro. Francamente, ni el propio Castro puede determinarlo. Sin embargo, mientras siga vivo, incluso discapacitado, su presencia tiene un escalofriante y retardador efecto en la sociedad cubana. Las altas expectativas el cambio están ahí, pero se asocian fundamentalmente a la idea de que el dictador tiene que morir para que algún cambio sustancial se produzca’. ‘¿Qué pasará cuando él muera?’, titula otro despacho, que tampoco prevé un escenario de convulsiones sociales, ni alteraciones en cuestiones de seguridad nacional, y que anticipa que el gobierno cubano mostrará su mejor cara, tanto interna como internacionalmente. Y se pondrá especial cuidado en ‘asegurar que la sociedad cubana entienda que Raúl y el resto del gobierno permanecen al mando’. Asismo, la Sección de Intereses manifiesta haber ‘revisado sus procedientos ante la muerte de Fidel y está preparada para afrontar potenciales contingencias’.
En medio de esta crisis, la Embajada de Estados Unidos en Caracas temió que Hugo Chávez interviniera militarmente a favor del régen cubano si Fidel Castro fallecía. Por este motivo, según El País, ‘recomendó al departamento de Estado que advirtiera a Chávez contra la tentación de conducir algún tipo de convulsión social en la isla caribeña’. ‘En el caso de que hubiera un conflicto civil en Cuba, creemos que es posible que Chávez considerara intervenir militarmente al lado de los elementos pro régen. No está claro si dicha intervención militar sería efectiva, peor la presencia, o incluso la sola amenaza, de una fuerza venezolana en Cuba, tendría tantes plicaciones para Cuba y para nosotros’, aseguran los documentos.
Raúl Castro tampoco se libra de la investigación estadounidense. Un año después de la crisis intestinal de Fidel Castro, el 18 de junio de 2007 falleció la esposa de su hermano Raúl, Vilma Spin. La misión diplomática estadounidense se refiere al episodio para decir que el actual presidente de la isla ‘siempre tuvo fama de ser un hombre de familia. Él y Vilma Spin fueron mucho más que Fidel y cualquiera de sus parejas. Algunas informaciones indican que cuando Fidel Castro cayó incapacitado, Raúl Castro sufrió una depresión, causada la paralela enfermedad terminal de su hermano y de su esposa, y más a causa de (la pérdida) de su esposa que su hermano’.
Seguiremos informando…