Conseguir un cartel publicitario eficaz es muy difícil, sino pregúntenle a los creativos del sector, pero cuando se trata de temas que afectan a toda la población sin excepción, como son los de salud, la cosa se complica aún más. Si nos paramos a analizar los carteles publicitarios en este ámbito sólo aquellos que nos persuaden de cambiar o suprir hábitos nocivos, véanse como ejemplos dejar de fumar, vacunarnos o usar métodos anticonceptivos, son los realmente eficaces.
Como reconociento a toda la labor realizada estas campañas informativas ‘saludables’, muchas de ellas realizadas autores anónos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado un libro en el que realiza un recorrido histórico de éstas, recopilando su evolución con el paso del tiempo. La obra, titulada ’60 años de campañas para la salud pública’ y traducida al árabe, al chino, al español, al francés, al inglés y al ruso, recoge trabajos realizados en todo el mundo sobre campañas de salud pública. En el ejemplar se ‘cuelan’ dos españolas, realizadas encargo del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad a la compañía Life Brands. En concreto se trata de las campañas: ‘Alcohol, tú verás lo que te mola’ y ‘Cocaína. Hay trenes que es mejor no coger’.
La publicación cuenta con ocho interesantes capítulos que deben de presentarse con ejemplos, aunque sea de manera breve. El prero de ellos ‘Vacunar’ resalta la tancia que han tenido las campañas sobre vacunación a nivel mundial para controlar en mayor o menor medidas algunas enfermedades. Con el paso del tiempo este tipo de publicidad se ha ido haciendo más informativa, incuyendo calendarios de vacunaciones, como recordatorio a los progenitores, e incitándoles a la utilización de la propia cartilla de vacunación.
El capítulo de ‘Prevenir’ muestra la constante preocupación de las autoridades sanitarias este asunto. Sólo hace falta observar un reciente cartel chino sobre gripe aviar para darse cuenta de ello. En el tercero, ‘Mantenerse lpio’ estas publicidades buscan complementar la enseñanza que se recibe de los padres y educadores respecto a la higiene. Las enfermedades de transmisión sexual son las protagonistas de ‘Protegerse’, y tuvieron una especial incidencia durante la II Guerra Mundial cuando los hombres se encontraban en el frente y las mujeres en casa. Evitar la práctica de la prostitución era su principal objetivo. Las campañas para prevenir el VIH tampoco se quedan atrás.
‘Abstenerse’, principalmente del tabaco, el alcohol y las drogas ilícitas continúan siendo objeto de numerosas campañas, pero no han llegado nunca a tener la repercusión deseada a pesar de las prohibiciones o litaciones que sufre la publicidad de tabaco y alcohol en la actualidad. Otro tema muy de moda es ‘Promover la seguridad’ en el trabajo y también en la carretera, en la prevención de incendios o en los accidentes domésticos.
Las mujeres y los niños son los protagonistas del sépto epígrafe, que lleva nombre ‘Amamantar’. Las barreras sociales y culturales marcan la estética más o menos atrevida de estas ágenes. Por últo, ‘Comer y moverse’ busca concienciar a la población de llevar una vida sana, con una alentación equilibrada y con la práctica habitual de ejercicio. ¿No os suena de algo todo esto? Al final, los carteles publicitarios pueden cambiar con los años, pero los mensajes perduran en el tiempo.
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