La Organización Mundial de la Salud ha llamado a las autoridades sanitarias para que tomen medidas contra la publicidad de alentos altos en grasas y sal dirigidos a menores. La televisión es el principal sote a estudio.
Según la OMS, la televisión es la responsable de que se fomenten acciones de g de comida ‘poco saludable’, y los estudios muestran que la pequeña pantalla influye de manera decisiva en la elección de los más pequeños a la hora de comer.
Las recomendaciones de la OMS a las autoridades sanitarias se centran en evitar que los menores se expongan a la publicidad de alentos con alto contenido de grasas saturadas, ácidos grasos trans, azúcares libres o sal, así como reducir el uso de técnicas de g para la promoción de estos alentos.
Según datos de la propia OMS, 43 millones de preescolares en todo el mundo tiene sobrepeso o es obeso. Así mismo, investigaciones científicas han demostrado que una gran parte de los a nuncios de televisión dirigidos a niños son de productos con un bajo índice nutricional.
En mayo de 2010, en la 63ª Asamblea Mundial de la Salud, los Estados Miembros de la OMS aprobaron una serie de recomendaciones sobre la comercialización de alentos y bebidas no alcohólicas dirigida a niños.
En España ya existe una regulación al respecto, materializada en la Ley de Seguridad Alentaria, y un compromiso parte de las empresas del sector de la alentación. Recogida en el Código PAOS promovido en 2005 la Agencia Española de Seguridad Alentaria y Nutrición (AESAN) y la Federación de Industrias de Alentación y Bebidas para la autorregulación en materia de publicidad de los 12 años a los 14, y al que ya se han adherido 36 empresas que suponen el 94, 29 ciento de la inversión publicitaria de alentos y bebidas en franjas para niños. Este código se basa en el acuerdo de coregulación voluntaria con los operadores económicos y los responsables de comunicación audiovisual en materia de publicidad de alentos dirigidos al público infantil.
