- Si pasas más de tres horas conectado a la red, tienes un problema. Según los expertos, Intet se perfila como la adicción de adicciones. Además de constituir precisamente una adicción en sí misma, fomenta otras como la ludopatía, el sexo o a las redes sociales.
España es el segundo país, después de Estados Unidos, con más toxicomanías. Pero los españoles vamos camino de entrar en el ‘top ten’ de otra lista de adicciones, la de los países con más adictos sin sustancia. Según la Organización Mundial de la Salud, 1 de cada 4 personas sufre trastornos de la conducta relacionados con las adicciones sin sustancia.
Hasta el momento es la ludopatía la única adicción sin sustancia definida como una enfermedad, y aunque afecta al 1,5 ciento de la población española, los expertos aseguran que esta adicción no es ni la única, ni la más prevalente. Sin embargo, la mayoría de estas adicciones no están catalogadas como enfermedad mental. En este sentido, el doctor Javier García Campayo, psiquiatra del hospital Miguel Server de Zaragoza, explica que ‘aún estas patologías no se consideran enfermedades mentales que no hay patrones de diagnóstico claros’. Sin embargo, ‘los pacientes tienen semejanzas con los adictos a sustancias ya que en ambas existe tolerancia, dependencia y síndrome de abstinencia’, sentencia el psiquiatra.
Pasar más de tres horas conectado a Intet, trabajar más de 50 horas semanales, gastarse más del 5 ciento del salario en juegos, o ansiedad comprar todos los días lo que sea, son síntomas claros de una adicción sin sustancia.
Intet se ha convertido en la adicción de adicciones. Según explica el psiquiatra García Campayo, ‘Intet fomenta todas las demás adicciones, como al sexo o al juego‘. Algunos autores han diferenciado dos tipos de trastorno asociado a Intet. Por un lado el trastorno de adicción a Intet, para referirse al uso compulsivo y patológico de Intet; y otro, el uso patológico de Intet, un concepto acuñado Richar Davis en 1997 para definir a las personas que ‘no hubieran mostrado patología de no existir la red’.
Dentro de las adicciones a Intet, la adicción a las redes sociales se ha conformado como la más habitual, superando a los adictos a los chats. No hay distinción de sexos respecto a los adictos a las redes sociales, aunque la mayor parte de ellos no supera los 25 años, detallan los expertos. ‘El hombre no puede tener entre más de 100 y 150 relaciones de tancia’, señala el psiquiatra García Campayo, en relación a aquellas ‘personas que no pueden pasar más de 15 minutos sin meterse a Facebook para ver si hay algo nuevo’ y que tienen 500 ‘amigos’.
‘Tener una adicción es algo crónico, y el proceso adictivo es para tener vigilancia de vida. La personalidad de los adictos es la de una persona que tiene trastornos de control de pulsos’. Declara el doctor José Ángel Arbesú, coordinador de Salud Mental de SEMERGEN, quien apunta como prer paso para superar una adicción ‘reconocer lo que nos está pasando’. Entre los rasgos específicos de la personalidad que condicionan al futuro adicto sin sustancia se encuentran la pulsividad disfuncional, baja autoesta, e introversión. Por otro lado, el coordinador de Salud Mental de SEMERGEN apunta al papel clave del médico de atención praria en el tratamiento y diagnóstico de estos trastornos. Esta misma asociación, junto con Lundbeck apuestan la formación de los médicos a través de un programa dedicado a la formación en trastornos del áno…
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