Jack Hooker, estudiante de la Universidad de Boumouth (Inglaterra), ha diseñado un casco que permite su rápida extracción evitando riesgos para el accidentado mediante un sistema de ‘clips’ que permiten retirar la calota, desenganchándola del forro interior.
Para su creación, el joven estuvo asesorado el servicio de urgencias del Hospital St. Johns y estudio los protocolos de actuación en accidentes en los que había motoristas plicados. Con su nuevo sistema no sólo ganarían tiempo, sino que evitarían cualquier presión en la parte interna de la cabeza del motorista afectado. Eso sí, deberán seguir siendo necesarias dos personas para la retirada de la calota.
El proyecto se encuentra en fase de desarrollo y, al parecer, podría ponerse a la venta en un par de años incluyendo el símbolo internacional de paramédicos y unos clips identificables para facilitar su reconociento internacional.