La polémica y extravagante Lady Gaga es agen de la nueva campaña de Supreme, para quien posa prácticamente desnuda, cubierta productos de la marca o con poco más que una camiseta.
El fotógrafo encargado de reflejar ‘los encantos’ de la cantante fue Terry Richardson, quien ya la ha retratado en otras ocasiones. Esta vez, en la sesión predominaban los contrastes entre los colores blancos y rojos. Entre los accesorios con los que posa se encuentra un skate, una camiseta muy ceñida, unas gafas de sol y unos zapatos con altísas plataformas.
El resultado de este trabajo es una atrevida campaña, no exenta de polémica al posar semidesnuda de la mano de un niño de unos cinco años.