- Tras la pausa de varios días para decidir sobre lo acontecido en torno a la denominada “Operación Crucero Banús” en la que comprobamos el pulso del macro juicio de la Malaya, la mañana del martes de reanudan las vistas con la declaración del supuesto cerebro de la trama corrupta, Juan Antonio Roca.
GORKA ZAMARREÑO (ENVIADO ESPECIAL A MÁLAGA) La fase que comienza gira en torno a las empresas y testaferros (15 en total entre los que destacan Montserrat Corulla y Oscar Benavente) que el ex gerente de urbanismo utilizó para blanquear y ocultar el dinero negro de las operaciones ilícitas con las que Roca y su círculo cercano se lucraron durante años.
Y es que las cuentas no salen, cualquier ama de casa especialista en estirar sueldos como chicles, sabrá que con unos ingresos de 12.000 euros netos al mes no se puede conseguir un patronio de 120 millones de euros reconocidos el propio Roca. Todo ello a pesar de que el calvo de los millones ha tocado varias veces a la puerta del que fuera el hombre mas poderoso de Marbella.
De hecho el encausado ha reconocido que “con unos ingresos de 12.000 euros al mes en el Ayuntamiento de Marbella yo vivía muy bien”. Para colmo, el acusado reconoció que parte de sus ingresos no los declaraba a Hacienda. Tampoco declaraba los beneficios de sus sociedades.
La fiscalía esta en 240 millones de euros el dinero lavado la trama y que proviene de actividades delictivas, principalmente el cohecho, a modo de comisiones. Esta ingente entrada de capital tenía su destino en las “más de 70 empresas” utilizadas como pantalla para el blanqueo.
Roca ha argumentado que cuando llegó a Marbella disponía de una fortuna personal de unos 3 millones de euros, fruto de varios negocios inmobiliarios que había emprendido en Murcia. Dichos activos estaban depositados en las cuentas de Marbella Inversiones.
Roca a reconocido que la falta de tiempo le llevó a contactar con Oscar Benavente para que pusiese orden y atención en sus negocios. Tras la moción de censura contra Julián Muñoz en agosto de 2003, dispuso de más tiempo ya que sólo le dedicaba a los asuntos municipales “los lunes y los martes gracias a un acuerdo alcanzado con la ex alcaldesa”, en referencia a Marisol Yagüe.
López Caballero ha desgranado un sonrrojante listado de bienes sunturarios pertenecientes a Roca, entre los que destacaban su colección de vehículos de lujo, carruajes valor de 3 millones de euros, una avioneta Cesna y un helicóptero así como obras de arte. La fiscalía ha querido saber si todas estas propiedades fueron adquiridas con los beneficios no declarados de sus sociedades. Roca le ha respondido que “con fondos no declarados y en parte con fondos de sociedades. No me atribuya la compra a mí que no es cierto”.
Es evidente que la estrategia de defensa del murciano pasa diferenciar sus actuaciones como persona física y las personas jurídicas de sus empresas de las que poseía distintas participaciones o en las que usaba testaferros.
