- Durante la conferencia ‘Libertad de información en Europa. La anomalía italiana y su contagio’, varios periodistas españoles e italianos analizaron la pluralidad de los medios de comunicación en Italia y Europa. El presidente de la Federación Italiana de Prensa pidió la unidad de los países para trabajar en este sentido. Ellos ya han empezado con recogida e firmas.
Los ponentes han manifestado que no corren buenos tiempos para la información, ni en Italia, ni como ha subrayado la presidenta de la FAPE, Elsa González en España, donde se han despedido en tres años a algo más de 4.000 periodistas. En este sentido ha dejado claro que los peores enemigos de la independencia de los medios son el paro y la precariedad. Al gran número de parados se une los periodistas con poca experiencia que están sustituyendo a profesionales con gran trayectoria: ‘se hace un periodismo de declaraciones, de políticos y famosos y damos voz a muchos personajes que no tiene mucho que decir’ y el resultado es la proliferación del rumor y las noticias sin contrastar.
Si como ha dicho Elsa González la situación en nuestro país es complicado, en Italia la situación se agudiza. El presidente de la Federación Italiana de Prensa, Roberto Natale, ha destacado que el problema de su países y de la televisión pública no llegó con Berlusconi, sino que es un problema de larga trayectoria. ‘Siempre la televisión pública ha estado subordinada al gobierno’, ha asegurado. Sin embargo, la situación con la llegada de Silvio Berlusconi al poder se ha agudizado, ya que no sólo tiene una televisión pública a su servicio, sino que es el dueño de un gran conglomerado de medios de comunicación privados. Además, ha explicado que en estos momentos se están despidiendo a grandes periodistas y con mucha solera de la televisión pública, a pesar de los buenos datos de audiencia y de conseguir dinero a través de la publicidad. La razón es que no gustan a Berlusconi. En este sentido ha relatado el caso de Roberto Saviano, un periodista incómodo que ha escrito sobre la mafia italiana y sobre la camorra. Saviano ha dejado su programa en televisión que no podía hace su trabajo.
Ante estas críticas a lo que está pasando con la televisión pública italiana, lejos de pretender una privatización, lo que se busca desde la Federación Italiana de Prensa es que las personas que dirijan esta televisión no sean elegidas el poder, sino que perfiles culturales y no sólo a la voluntad de los partidos políticos. El hecho de que Berlusconi sea el dueño de un gran perio mediático, a su juicio, está provocando que la televisión pública deje de ser una cadena con contenido para derivar en una programación parecida a las televisiones privadas. Afirma que la parrilla está vacía de contenido, ha bajado la calidad e incluso cuestiona los contenidos de los informativos que no dan información relevante. Pese a todo esperan que se genere un cambio.
Para mejorar la pluralidad de los medios de comunicación están realizando manifestaciones y protestas, que consideran que el ciudadano ‘tiene derecho a ser informado’ y no recibir noticias instrumentalizadas. Natale también ha tenido una crítica para Europa, que plantea medidas económicas, pero no se pronuncia en cuanto a la pluralidad de los medios de comunicación. Para dar un paso hacia delante están recogiendo firmas y quieren que todos los países se unan para trabajar el pluralismo en la información.
Pero no sólo Roberto Natale reflexionó sobre este tema. José María Ridao, escritor y periodista de ‘El País’ puso el acento en la tancia y la responsabilidad que tienen los periodistas a la hora de utilizar bien el lenguaje. En este sentido, ha puesto como ejemplo el caso de los refugiados de Libia que en Italia se les llamaba inmigrantes que tienen un significado jurídico distinto. ‘Cada vez que aceptamos que el gobierno designe la realidad con términos, estamos dejándole interferir en esta realidad. Se necesitan personas formadas y comprometidas a la hora de designar correctamente la realidad’.
Por su parte, el escritor Marco Calamai destacó la tendencia al populismo que hay en Italia y el fuerte papel que tiene la televisión en este sentido. ‘Yo creo que Berlusconi se ha sabido aprovechar de esto que se presenta como un político distinto. Y recuerda que Berlusconi siendo el dueño de las televisiones sabe y conoce muy bien al ciudadano al que se dirige. No obstante, manifestó su confianza en que la gente esté intentando cambiar esta situación, ‘no es verdad que la gente esté totalmente pasiva’, concluyó.
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