La disión de Pere Terrassa, ex director general de IB3, ha dejado en el aire al equipo directivo de la cadena. A la falta de acuerdo entre los partidos para nombrar al director general, hay que sumar la ausencia de directivos de la casa. Esta semana la intención de nombrar a un nuevo equipo se ha topado con una ley que rige el ente y que establece que estos cargos deben ser elegidos concurso púbico, lo que la cadena continúa en standby.
El pasado 18 de julio conocos que Pere Terrasa, hasta ese momento director general de IB3, había presentado su disión, una situación que no recoge la legislación del ente y que ha propiciado la salida de directivos de la casa y el posterior vacío de poder que pera en IB3.
Según la Ley de regulación de la televisión autonómica las personas nombradas el director general deberán abandonar su puesto 45 días después del anuncio de su marcha, lo que tras la salida de 15 directivos, IB3 se ha quedado sin las personas que deben tomar las decisiones. Según ha podido saber este diario la situación se prolonga desde hace dos meses, lo que la cadena funciona ‘al ralentí’, es decir, los profesionales continúan trabajando en los proyectos de medio y largo plazo pero ya se va notando la falta de dinamismo en la cadena y el planteamiento de nuevos proyectos.
Esta situación se ha intentado resolver estos días colocando a varias personas en los cargos de responsabilidad, sin embargo, en IB3 a diferencia del resto de autonómicas no es posible que un director general nombre a los directores de la casa a dedo, estos tienen que pasar un concurso público, y esta es la situación en la que se encuentran ahora. Las personas vistas con buenos ojos la dirección tendrán que pasar esta prueba basada en méritos. Los tiempos para resolver esta situación son 20 días, aunque puede prolongarse en el tiempo.
A esta situación cada vez más insostenible hay que añadir la de la falta de un director general en IB3. La marcha de Terrasa propició que el Antonio Gómez, consejero de Presidencia, asumiera la dirección de la cadena. Una situación anómala, pero que desde el gobierno aseguran que se produce que la televisión depende de Presidencia y ante la falta de una legislación que diga quién tiene que hacerse cargo, lo hace Gómez. Por el momento el consejero de Presidencia ha designado a Jacobo Palazón quien se presentó como el nuevo director general de IB3 pero no consiguió la mayoría necesaria para que asuma las funciones de director general del Ente Público de Radiotelevisión de las Islas Baleares mientras se aclara la situación o transcurren los seis meses necesarios desde la prera votación para que Palazón se convierta en director general de pleno derecho; ya que en esta segunda votación solo necesitaría una mayoría sple.
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