La tancia de la geolocalización y la ubicación es tan tante que es junto con el tiempo y las personas la manera de organizar el mundo digital. Según contó ayer en FICOD Olof Schybergson, CEO de Fjord, Casi todas las preguntas que hacemos en una conversación tienen referencias espaciales y cada vez más esas preguntas se han ido trasladando al mundo online.
Todo esto se ha debido gracias a la transformación de lo dispositivos. Las fases en las que esta transformación se ha producido otorga mucho valor y ventanas de otunidades. La aparición de los dispositivos móviles se dio en la prera frase, el momento en que la telefonía dejo de ser fija y paso a ser móvil. La segunda fase supuso la movilidad de intet, y la tercera fase en la que nos encontramos supone la conexión con el mundo real, la vuelta al origen. La tecnología forma parte de nuestra vida cotidiana y se integra en el mundo real. Lo que forma parte de la tercera hibridación en palabras de Jae García Cantero, tras la difuminación de las fronteras entre lo real y lo aginario, y lo público y lo privado.
Los Bits se han convertido en parte del mundo del físico, están ahí aunque no los veamos, son como electrones que solo podemos ver con aparatos sofisticados, paseamos la calle y no somos conscientes de su existencia, pero apuntamos con nuestro dispositivo móvil a Tes Square y aparecen ante nosotros miles de datos codificados, etiquetados que nos convierten en nativos de lugares extraños e integra el mundo real y el virtual hasta hacerlo indivisible.
La realidad aumentada y la geolocalización difuminan la frontera entre lo que es real y lo virtual dejando obsoleto el ciberespacio para conformar un nuevo ecosistema que integre ambos mundos convirtiéndolo en uno solo.
Seguiremos informando…
