Acabo de leer (domingo 4 de diciembre) que la Asociación de Ayuda a las Víctas del Terrorismo del “11M” va a echar el cierre falta de ayudas oficiales y eso me ha sublevado (si es que a mi edad tengo ya ganas de sublevarme)… y me ha sublevado que todavía me quedaba la esperanza de que algún día “alguien” llegase al fondo de la verdad de lo que fue aquella matanza de inocentes. Pero, veo que no. Que aquí hay intereses ocultos que luchan en la sombra para que nunca se sepa la verdad y no paran de echarle tierra al atentado de Atocha, el mayor de la Historia de España. Señores, si Shakespeare dijo aquello de “Algo huele a podrido en Dinamarca”, cuando Hamlet tuvo la intuición y casi la certeza de que los verdaderos asesinos de su padre, el Rey, no habían sido otros que la Reina, su madre, y el nuevo Rey, su tío, aquí con mucha más razón puede decirse que “Algo huele a podrido en el 11M”, pues no en vano todavía (8 años después) no se sabe quiénes fueron los cerebros que idearon y planificaron el atentado y se tienen todas las dudas sobre quiénes fueron realmente los autores materiales, los explosivos que se utilizaron y cien cosas más. ¿Algo huele a podrido?. ¡No!. Algo no, todo huele a muy podrido.
Pero, antes de adentrarnos en el “11M” voy a referirme, aunque sea brevemente, a los dos casos de nuestra Historia más parecidos: el atentado y muerte del general Pr en 1870 y el del almirante Carrero Blanco en 1973. Porque en los dos casos pasó lo que ahora está pasando, que nunca se supo, ni se quiso saber, quiénes habían sido los “cerebros” de los magnicidios. Para escribir uno de mis libros investigué a fondo aquellos atentados (y hasta tuve la paciencia de leerme los 18.000 folios del sumario del prero y los más de 60.000 del segundo). Con una técnica, la de Agatha Cristhie en sus novelas. La inglesa lo prero que se preguntaba al aparecer el muerto o los muertos era: “¿A quién beneficia esta muerte?”. Y eso hice yo. ¿A quién benefició la muerte de Pr? Y los hilos conducían a cuatro posibles interesados: los republicanos, que aspiraban a traer su República; al general Serrano, que aspiraba a una Dictadura; al Duque de Montpensier, que quería hacer Reina a su mujer, la hermana de la Reina destronada, y a los monárquicos alfonsinos, que ya luchaban traer otra vez a los Borbones. Todo fueron conjeturas, que tampoco la Justicia se esforzó en buscar las pruebas definitivas. Sin embargo, hubo un hecho, que al final los más beneficiados fueron los Borbones, que volvieron a reír cuatro años más tarde. El sumario se archivó sin saber la verdad últa.
También investigué a fondo el atentado de Carrero Blanco y empleando la misma técnica: ¿A quién benefició esta muerte? Y me encontré con lo mismo: varios posibles interesados en la desaparición del almirante, ya que para muchos significaba la continuidad del franquismo tras la muerte de Franco. En especial en el tema de la Monarquía, que es verdad que Carrero defendía la Monarquía, pero ¡ojo¡ no la Monarquía que quería Don Juan y sus seguidores, sino una Monarquía “tradicional y católica” con base en los Principios de la victoria del 39, como bien se lo dejó claro al Conde de Barcelona en Estoril en1947 (como consta en “La larga marcha de la Monarquía” de López Rodó). Y al final ¿qué pasó? ¿quién fue el beneficiario de aquel atentado?. Pues la Monarquía que llegó, la Monarquía parlamentaria y democrática. Y allí apareció ya ETA como autora material, pero desde el prer momento se supo que la banda terrorista vasca sólo había sido el brazo ejecutor, e incluso encargo y pago mercenario. Pero ¿quiénes? ¿quiénes fueron los verdaderos cerebros del atentado? ¿quiénes pagaron a ETA? (Algo apuntó a este respecto el monárquico Areilza poco antes de morir). Eso nunca se ha sabido ni se investigó a fondo.
Lo cual no es suficiente, claro está, para afirmar que los beneficiarios sean los cerebros, como también se demuestra en las novelas de Aghata Cristhie. Porque no siempre los beneficiarios del cren son los asesinos. Unas veces sí, otras veces no.
Ahora vayamos al “11M” y con la misma pregunta de la inglesa: ¿A quién benefició el atentado de Atocha? Y aquí sí que no hay duda: al PSOE, ya que gracias a la matanza de aquellos 192 inocentes y a los 2000 heridos ganó unas elecciones generales (las del 2004) que tenían perdidas según las encuestas. Los socialistas supieron manipular entonces “aquello” y en 48 horas convencer a los españolitos que la autoría llegó como venganza de los árabes la guerra de Irak. Pero, eso no fue verdad, o no fue toda la verdad. Porque nunca se demostró que los “moritos” que aparecieron como responsables materiales del atentado, y los que fueron condenados como “cerebros”, fueran realmente los autores. Los periodistas que hemos investigado el “11M” y lo que pasó el 12, 13 y 14 sabemos que hay muchas cosas que intencionadamente se han ocultado. Por ejemplo, que el atentado se comenzó a preparar CON ETA dos años antes y que sólo cuando comenzó la guerra de Irak se buscaron las “marionetas” moras con fines electorales (se sabía que si el atentado había sido cosa de ETA ganaría el PP y sí detrás estaba AL KAEDA, las ganaría el PSOE, como así fue). También se sabe que los explosivos tenían la marca ETA, que las pruebas fueron manipuladas o borradas (como los trenes) y muchas cosas más. Y mucho más tante que los hilos de la investigación periodística lleva a tres personajes concretos como “cerebros intelectuales”: dos políticos que viven, y un coronel espía que poco después incluso sería ascendido a general ¿y qué no se dicen estas cosas? Muy sencillo, que los periodistas nos movemos con indicios y evidencias, pocas veces con pruebas definitivas y punibles. Señores, eso es cosa de los Jueces y también en este apartado hay sus más y sus menos, que está demostrado que el juez Gómez Bermúdez o que no quiso, o no pudo o no se atrevió, cerró la herida dejando dentro todo lo podrido (curiosamente el Ministro Rubalcaba condecoró después al Juez e incluso le otorgó una pensión económica).
Es una pena, pero muchos confiamos que antes o después el pueblo español pueda saber toda la verdad del atentado de Atocha. Al menos si al “Mundo”, a Pedro Jota y a Casiro García Abadillo no les callan la boca. Si tardaron 13 años en llegar al fondo de la verdad en los crímenes del GAL, todavía les quedan 5 años para llegar a desenmascarar a los verdaderos “cerebros” del “11M”. Salvo que nos quedemos como aquellos otros españoles se quedaron cuando el asesinato de Pr y Carrero Blanco. A oscuras. ¡Dios, la Asociación de Ayuda a las Víctas del Terrorismo no puede desaparecer!










