El ERE planteado Prisa no ha podido equilibrar la caída de los ingresos del Grupo. Es ello que en los últos dos meses se han ido sumando diferentes decisiones de emergencia para paliar la crisis como la reducción salarial de los directivos, recortes a los colaboradores o subida del precio del El País. Las últas han sido propuestas este vies y tienen que ver con la conciliación laboral y la reducción de jornada.
Los servicios de Recursos Humanos de todas las empresa de Prisa han enviado un comunicado con un conjunto de medidas favorecedoras de la conciliación a todos los trabajadores. En el texto explican que ‘las medidas que se proponen están consensuadas con todas las Unidades de Negocio’ y que tratan de responder a los problemas de conciliación que en convenios antiguos pedían los trabajadores a la empresa y que no llegó a hacerse efectivo. Y añade que estas ‘permitirán reducir los costes sin necesidad de tener que adoptar medidas traumáticas’.
¿Pero en qué consisten estos nuevos ajustes? El Grupo ofrece a los trabajadores con al meses seis meses de antigüedad la posibilidad de acogerse a excedencias voluntarias especiales o permisos no retribuidos. En el prer caso, la empresa seguirá pagando la Seguridad Social de estos trabajadores y éste recibirá al volver a su puesto el 20% del salario fijo que le hubiera correspondido recibir durante el periodo de excedencia. El segundo caso tiene una duración máxa de tres meses sin sueldo.
También da a los trabajadores la posibilidad de alargar sus vacaciones un periodo míno de 10 días laborales y ampliar el descanso semanal, esto sería posible en aquellas categorías que permitieran concentrar la jornada laboral en cuatro días a la semana. Pero es la empresa la que de forma discrecional la que dará el visto bueno al trabajador, que deberá solicitar lo que desea escrito.
El ERE que se desarrolló durante 2011 en el Grupo y que en principio se habló de que afectaría a 2500 personas no ha sido suficiente para llegar a los objetivos de recortes de costes. Desde que comenzó 2012 hemos ido contando distintas medidas de ahorro que ha ido planteando el Grupo para hacer frente al que parece que va a ser uno de los años más duros vividos hasta ahora.
A finales del mes de enero, Prisa puso enca de la mesa un conjunto de disposiciones para contener los gastos. Las preras afectaron a las remuneraciones de los colaboradores que se redujeron un 10%, pero también se extendieron a la cúpula de la dirección. Los directivos se podían acoger de forma voluntaria a una bajada del 7% de su salario, un planteamiento al que ya se habían acogido los directivos de la Cadena Ser, El País y Prisa TV pero que se haría extensible a todas las empresa del Grupo, entre las que se encuentran As, Cinco Días, Canal Plus, Plural Entertainment, Prisa Digital, Prisa Revistas, etc.
En el caso de El País, también se han tomado medidas concretas. A finales de 2011 la empresa y el Comité de empresa llegaron a un principio de acuerdo del convenio colectivo en el que se subía el sueldo de las categorías más bajas hasta los 33.000 euros a cambio de que los trabajadores renuncien a la subida del IPC durante 3 años. En los últos días, se el diario ha realizado una encuesta de hábitos de consumo en las que se preguntaban, entre otras, cosas que si se seguiría comprando el diario en el caso de que desaparecieran los cuadernillos regionales y ayer conocos que el diario de Prisa había decidido subir el precio ejemplar a 1,30 euros, los que repercutirá en unos ingresos de 430.000 euros de sus ingresos ventas de ejemplares durante un mes, es decir unos 5,1 millones de euros al año si es que mantiene la media de ventas del mes de enero.
Estas medidas hay que leerlas en un contexto de pérdidas generalizadas del Grupo en 2011. Según los resultados de enero a diciembre del años pasado publicados en la CNMV, Prisa ha tenido unas pérdidas de 451 millones de euros. Una cifra que se explica las provisiones de 253 millones deterioros del fondo de comercio en sus negocios de Portugal y de 183 millones ‘conceptos fiscales en discusión’. Durante este ejercicio los ingresos del Grupo cayeron un 3,5% con respecto al año anterior mientras que los gastos aumentaron un 11%, lo que arrojó un beneficio operativo (EBITDA) de 436 millones, una caída del 26,7% frente a los datos de 2010.
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