Entre infinitas risas e intensas horas de trabajo, Cícero Comunicación ha cumplido 10 años. El balance de esta década está cargado de orgullo, ilusión y excitación en un proyecto que mira al futuro con las pilas cargadas y confiando en que el periodismo mantendrá su espíritu intacto independientemente de que sea digital o analógico. Esteban Bravo y Fernando Gordon, directores y fundadores de Cícero Comunicación, responden a una entrevista que mezcla la reflexión con ese toque de humor y optismo que les caracteriza y siempre les acompaña.
Cícero Comunicación cumple 10 años… Se dice pronto, ¿pero podríais resumir también en pocas líneas el balance de esta década?
Te lo podríamos resumir en una palabra: orgullo. Orgullo haber hecho de un acto casi irreflexivo en su origen, un proyecto personal y profesional consolidado; la confianza que nuestros clientes, la mayoría compañías multinacionales en la parte alta del ranking farmacéutico mundial, han depositado en nosotros, una empresa local sin oficinas en Miami ni Melbou, pero que conoce perfectamente los frentes donde se libra diariamente la batalla de la comunicación en el sector farma; la respuesta de los medios a nuestra forma de trabajar; que creemos que las personas que componen el equipo de Cícero son felices cada día que entran la puerta de la agencia; y, últo, que en diez años hemos sido capaces de construir relaciones más allá de las profesionales. Tenemos la presión de que a muchas personas les apetece de verdad tomarse unas cervezas y echarse una partida de bolos con nosotros, con la gente de Cícero.
¿Cuáles son los principales cambios que habéis observado en el sector de la Comunicación sanitaria en estos últos 10 años?
Conceptualmente te diríamos que hace poco más de 20 años en el sector no quería hablar casi nadie, políticos al margen, claro. Los diez años siguientes sirvieron para convencer a la gente, a los actores fundamentales del sector, sobre la tancia de la comunicación. Y esta últa década ha sido la de la batalla competitiva. Empresas, profesionales sanitarios, pacientes… Todos han entendido la tancia de la visibilidad, de la influencia. Hoy ya nadie se quiere perder la gran feria de la comunicación, aunque eso sí, en el tiovivo igual ya no hay caballitos para todos.
El eterno debate, ¿ Periodista especializado o periodista todoterreno?
Este debate, en el que nosotros siempre nos hemos posicionado a favor de la especialización, tuvo su punto álgido hace ya algunos años. Hoy, según están las cosas en la profesión creemos que el debate es el de la supervivencia. El de la reinvención de los medios de comunicación como modelos de negocio y el de sus profesionales como elementos nucleares en la creación de un producto periodístico de valor y calidad.
¿Cuál sería el perfil ‘idóneo’ de un periodista sanitario en 2002 y cuál sería ese perfil en la actualidad según vuestro criterio?
No creemos que el perfil idóneo de un periodista, no sólo sanitario, haya cambiado en estos diez años. Quizás la diferencia en el sector sanitario radique en esa multiplicación de las fuentes de las que hablábamos. Las fuentes se multiplican y los recursos disminuyen, lo que conlleva un esfuerzo ímprobo parte del periodista que quiera hacer un trabajo riguroso en base al control y contraste de dichas fuentes
¿Cuáles son los tres recuerdos más positivos de vuestro trabajo desde que nació Cícero?
En los recuerdos lo emocional siempre queda más anclado que lo racional. Por eso lo que nunca olvidas es cuando alguien te dice que es un placer trabajar contigo. Cuando eres consciente de que alguien se pelea y da la cara ti. Cuando a la conclusión de un proyecto alguien que ha apostado ti te da las gracias y te dice que no le has decepcionado
¿Y los tres más negativos?
Aunque también tienen más que ver con lo emocional que con lo racional, como son muy pocos mejor dejarlos en la cocina de Cícero
Parece que las Redes Sociales ya han introducido cambios en las formas de Comunicación, ¿han afectado estos cambios a la hora de desarrollar vuestro trabajo en la agencia?
En Cícero hace ya tiempo que no planteamos una propuesta sin que contemple una parte nuclear en su estrategia que haga referencia a las redes sociales y, en general, a los nuevos canales. En el sector sanitario estamos en una fase muy embrionaria y creo que las bases han de ser muy sólidas para no sufrir a medio plazo un golpe duro en términos de agen y reputación. No es fácil entender la diferencia entre comunicación y conversación.
Percibos que son muchas las empresas que piensan que esto es splemente un cambio de herramientas para seguir haciendo lo mismo que se ha hecho hasta ahora. Pero no. Los cambios son mucho más relevantes. No estamos hablando del paso del fax al email. Estamos hablando de hacer partícipes a las personas, a esos tan manidos públicos ‘target’, de nuestras estrategias de comunicación. Esto da vértigo y, en muchos casos, miedo. Como digo, estamos en pleno proceso de compartir y entender junto a nuestros clientes esta nueva filosofía que marcará la comunicación entre los mercados y las personas en los próxos años
¿Calarán hondo las Redes Sociales?
Las RRSS, su filosofía y cultura ya han calado hondo. ¿Qué pasará con Facebook o Twitter? no lo sabemos…pero tenemos la certeza que el camino que han abierto las RRSS a la hora de establecer nuevas formas de comunicación entre las personas quedará marcado en la historia como quedó el momento del fuego, la rueda o la electricidad.
¿Transformarán el periodismo o se acabarán convirtiendo en la burbuja 2.0?
Creemos que, en esencia, el periodismo como oficio no debería cambiar ni transformarse más allá de la capacitación técnica que requieran los nuevos canales. El espíritu de la profesión debería seguir siendo el mismo independientemente de que se ejerza un periodismo digital o analógico. Otra cosa diferente es la empresa informativa o periodística. Los que toman decisiones en los medios sí deben tener muy en cuenta este nuevo entorno. Quien piense que se puede dar un paso atrás a la hora de elaborar un producto informativo de calidad a cambio de un rédito cortoplacista en términos de tesorería, estará cavando su propia fosa. La empresa es la que no puede bajar la guardia a la hora de dignificar el trabajo final de sus empleados, de sus periodistas.
Los proyectos siempre nacen con un componente no material muy tante, la ilusión, ¿la seguís manteniendo en la actualidad?
Seguos manteniendo la ilusión de poder retirarnos antes de cumplir los 67. Bromas aparte, más que ilusión, quizás la puesta en marcha de un proyecto lo que conlleva es excitación. La excitación inherente a la fase embrionaria de cualquier aventura. La ilusión es ahora cuando la tenemos más que nunca. Ilusión lo conseguido en estos diez años, e ilusión para que tanto nosotros como las personas que integran Cícero podamos vivir dignamente muchos años más de este proyecto. Las personas de Cícero nos reímos a diario. Planes de negocio a parte, esas risas son las que garantizan nuestro futuro.
Un deseo o sueño para los próxos 10 años…
El sueño: que te vengas a hacernos la entrevista del XX aniversario a nuestras oficinas de Seychelles. El deseo: que para entonces se hayan solucionado los problemas de los pilotos con Iberia y te puedas coger el avión.
¡Muchas felicidades!
Seguiremos informando…