La inmunización del adulto con la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente representa una estrategia mejor para prevenir la enfermedad neumocócica invasiva en adultos, ya se trate de pacientes inmunocompetentes o inmunodepridos; ésta es la principal conclusión de los datos del prer año de un estudio español (ODIN) presentados en el Congreso Anual de la Sociedad Europea de Patología Respiratoria (ERS) que se está celebrando en Viena. Tal como explica el doctor Antoni Torres, del Servicio de Neumología y Alergia Respiratoria del Hospital Clinic i Provincial de Barcelona, investigador principal de este trabajo, “la cobertura potencial de serotipos con la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente es superior en pacientes inmunocompetentes (70%) que en inmunodepridos (44%); sin embargo, la necesidad de esta vacuna queda patente en ambos tipos de pacientes debido a las ventajas que ofrece la tecnología de la conjugación frente a las vacunas planas de polisacáridos”.
Las enfermedades producidas Streptococcus pneumoniae (también conocido como neumococo) constituyen una tante causa de morbilidad y mortalidad, especialmente en los adultos a partir de los 50 años y en los afectados enfermedades crónicas o inmunosupresión. El Estudio ODIN (Estudio Epidemiológico Prospectivo de Vigilancia Hospitalaria de la Enfermedad Neumocócica Invasora en Adultos a partir de 18 años en España), de tres años de duración, se está realizando en nueve hospitales de cinco comunidades autónomas y “muestra que la forma clínica más frecuente de enfermedad neumocócica invasora (ENI) en el adulto es la neumonía bacteriémica, que supone el 71,2% de las hospitalizaciones ENI”. Según los resultados del prer año de este estudio, el antecedente personal más tante para padecer una ENI, después del tabaquismo, es la neumonía previa; “y le siguen otras comorbilidades en función de la edad: la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) e insuficiencia cardiaca, en los mayores de 75 años; la neoplasia y hepatopatía crónica, entre los 50 y los 64 años; o la infección VIH, que se presenta con mayor frecuencia entre los 18 y 49 años”, destacó el experto.
Las infecciones neumocócicas se producen, principalmente, en los preros años de vida y en adultos a partir de los 50 años. Aunque la incidencia es mayor en niños, las complicaciones y la mortalidad son más frecuentes en adultos, sobre todo en ancianos.
Protección también para adultos
La autorización de la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente para la prevención de la enfermedad neumocócica invasora en adultos de 50 ó más años (en Europa desde octubre de 2011 y en Estados Unidos desde diciembre de 2011) está basada en los datos clínicos de inmunogenicidad y seguridad de la misma en más de 6.000 adultos de 50 ó más años de edad, obtenidos en seis ensayos clínicos de fase III.
En dichos ensayos, la vacuna antineumocócica conjugada demostró la superioridad de la respuesta inmune frente a la vacuna antineumocócica polisacárida, tanto en adultos previamente vacunados con la polisacárida como en adultos no vacunados previamente con ella. En concreto, en este estudio se observó que el 25% de los pacientes inmunodepridos y el 22% de los pacientes totales incluidos en este prer año del estudio, y que habían adquirido la enfermedad neumocócica, habían sido vacunados previamente con la vacuna antineumocócica polisacárida.