LLORENTE & CUENCA en colaboración con CEOE y la Universidad de Salamanca, ha elaborado el cuarto estudio sobre las relaciones empresaGobierno. El análisis se ha basado en las respuestas de 1.800 empresarios, gobernantes, altos funcionaros y legislativos de España, Portugal y América Latina.
Según los datos obtenidos, los rasgos que más valoran los empresarios españoles encuestados sobre la clase política son la honradez y la eficiencia. También, sostienen características como: la formación educativa y los conocientos técnicos.
Desde prnoticias le hemos preguntado a Jorge Cachinero, Director Corativo de Innovación y Reputación de LLORENTE & CUENCA, cómo mejorar las relaciones de confianza entre empresa y gobierno a través de la Comunicación.
‘El flujo de la información entre empresas y gobierno, en el territorio español, se le puede calificar de notable. En nuestro país, cada vez hay mayor apertura desde los políticos hacia las empresas y menos dificultades para que un empresario descuelgue el teléfono y vaya a ver al diputado de su circunscripción, a los responsables de la administración y existe comunicación entre ambos’.
Entre las conclusiones que recoge el estudio realizado en España, merece la pena destacar que cerca del 50% de los empresarios encuestados afirma que el contacto entre empresas y Gobierno es escaso o nulo, un punto de vista que no comparten los políticos, ya que el 50% de ellos asegura que éste es frecuente o constante. Aun así, ambos públicos coinciden en asegurar que el flujo de información entre ellos es bueno.
‘Se organizan actos, debates, presentaciones donde vienen desde ministros de gobierno, secretarios de Estado, hasta directores generales, para que los empresarios tengan contactos más estrechos con el mundo de la política’, ha afirmado Jorge Cachinero para prnoticias. A lo que añade el Directivo de LLORENTE & CUENCA: ‘La clave está en el paso final que no es en el contacto ni en el flujo de información si no que está en el ser capaz de poner delante del decisor público las propuestas empresariales que encajen con la agencia de prioridades de los políticos’.
Volviendo a los resultados del estudio, empresarios y gobernantes tampoco coinciden con respecto a la influencia de los preros en el diseño de las políticas económicas del país.
Tampoco llegan a un punto de acuerdo en cuanto a la confianza que genera la política del Gobierno en las empresas, aunque de nuevo, los datos reflejan una destacable mejoría, pasando de un 86% de respuestas escasa y nula parte de los empresarios en 2011, a un 51,7% en los resultados de este año.
A la pregunta de cómo encauzar la falta de confianza debido a la actual crisis, Cachinero señala que ‘afortunadamente funcionan bien, puesto que siempre están a disposición de las empresas para que presenten propuestas empresariales atractivas en clave política’.
Un aspecto en el que ambos colectivos coinciden es en la seguridad jurídica de las empresas, que consideran muy satisfactoria, así como en la responsabilidad social corativa, afirmando que está presente en la gestión de las empresas.
Y, tanto los empresarios como los gobernantes y políticos españoles se fijan en el mercado laboral como medida más urgente para afrontar la situación económica del país, seguida de la deuda pública y del marco regulatorio.
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