La inmunización frente a neumococo en adultos es la mejor estrategia de prevención de la enfermedad neumocócica en el adulto. Así se ha puesto de manifiesto en la Jornada “Vacunación en el adulto: protocolos de actuación según situación clínica”, celebrada recientemente en Pamplona, un encuentro llevado a cabo con el objetivo fundamental de poner en valor la tancia de la vacunación en adultos como forma de promoción de la salud y prevención de la infección.
Tal como ha explicado la doctora Judith Chamorro, Jefe de Sección de Medicina Preventiva e Higiene Hospitalaria del Complejo Hospitalario de Navarra y coordinadora de la jornada, “La infección producida el neumococo es un tante problema de salud pública en las personas mayores de los países desarrollados. A pesar de existir tratamientos antibióticos eficaces –aclara Chamorro, la letalidad de esta enfermedad en los ancianos es elevada”.
La enfermedad neumocócica se produce principalmente en los preros años de vida y en adultos a partir de los 50 años. Aunque la incidencia es mayor en niños, las complicaciones y la mortalidad son más frecuentes en adultos, sobre todo en los ancianos.
Por otra parte, hay grupos de población en los que el neumococo se comta de manera más agresiva y en los que la enfermedad puede llevar a la muerte hasta en un 40% de los casos. Entre estos grupos de riesgo, “se encuentran las personas diabéticas, las que sufren enfermedades pulmonares y/o cardiacas, los pacientes esplenectomizados, los tratados con terapias inmunosupresoras (corticoides, citostáticos, etc.), o los pacientes inmunodepridos”, según describe la doctora Chamorro, que se beneficiarían especialmente de la vacunación antineumocócica. Asismo, para lograr una mayor efectividad de la inmunización pueden ser necesarias pautas diferentes dependiendo del estado de salud del paciente, lo que, de cualquier modo, en algunos casos “habrá que hacer una valoración individualizada de la vacunación”.
En este sentido, el doctor Vicente Domínguez, Jefe del Servicio de Medicina Preventiva y Salud Pública del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña, que ha participado en la Jornada, señala que “la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente va a atar muchos beneficios a la población adulta, ya que cubre un espectro tante en la prevención de la enfermedad neumocócica invasiva, principalmente; sobre todo en aquellos adultos que padecen una enfermedad de base”. Esta vacuna está recomendada la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH).
Algunas ventajas de esta nueva vacuna conjugada frente a la clásica se observan en lo que a inmunogenicidad se refiere: “produciendo una respuesta inmune superior”, comenta el doctor Domínguez. “Por otra lado, la vacuna trecevalente produce memoria inmunológica lo que favorece, ante una segunda exposición al mismo antígeno, el desarrollo de defensas muy superiores al que desarrolla la polisacárida”, concluye.
Concienciación social
A pesar de que las vacunas hayan demostrado ser una estrategia eficaz en la prevención de enfermedades, lo cierto es que aún falta concienciación, tanto entre la población como entre los propios profesionales, como explica la doctora Chamorro, “puesto que existe la creencia errónea de que su utilidad queda restringida a la edad infantil, cuando se trata de una de las medidas sanitarias que mayor beneficio han producido en el control de las infecciones”. De hecho, esta especialista considera que cada visita de un adulto al sistema sanitario debería ser una otunidad para revisar su estado inmunitario y recomendar las vacunas necesarias según su situación clínica, y asegura que la concienciación empieza los profesionales: “es necesario que informen a sus pacientes sobre la conveniencia de actualizar la protección inmunológica frente a las enfermedades inmunoprevenibles”.
Vacuna trecevalente
La Comisión Europea autorizó en octubre de 2011 el uso de la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente (Prevenar 13®) para la prevención de la enfermedad neumocócica invasora en adultos de 50 o más años. Esta aprobación se basó en los datos clínicos de inmunogenicidad y seguridad de la misma en más de 6.000 adultos de 50 ó más años de edad, obtenidos en seis ensayos clínicos de fase III. En dichos ensayos, la vacuna conjugada demostró la superioridad de la respuesta inmune frente a la vacuna antineumocócica polisacárida no conjugada, tanto en adultos previamente vacunados con la vacuna antineumocócica clásica como en adultos no vacunados con esta vacuna. En España, la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente está aprobada y disponible desde el mes de julio.