El plazo de negociación de treinta días que tienen el comité y la dirección de El País finaliza mañana y las negociaciones entre ambas partes están totalmente paradas. El comité pide que la empresa presente una oferta seria tanto en las prejubilaciones como en las bajas para que sea viable acogerse a ellas voluntariamente, de otra forma consideran que tienen que ‘jugársela a la vía judicial’, que según explican, no se ven firmando los despidos de sus compañeros.
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El País está viviendo hoy el segundo de los tres días de huelga. En esta jornada y a tan solo un día de que finalice el mes de negociación con la empresa el comité de empresa ha convocado a una rueda de prensa en la Asociación de Prensa de Madrid (APM) para explicar la situación que están viviendo. Por el momento, la últa reunión que mantuvieron –ayer las partes se levantaron sin acuerdo, mañana, antes de que finalice el plazo se producirá otra.
Desde el comité defienden que la empresa presente una oferta razonable tanto en prejubilaciones como en bajas para que los trabajadores se puedan sumar a ellas de forma voluntaria, sino la salida la que apostarán será la judicial. Por el momento, la dirección ha ampliado las prejubilaciones hasta las personas que cumplan 58 años en 2013 y ofrece el 65% de sus salario para los que superen los 60 años. Una propuesta que no propiciaría que muchos trabajadores se acogieran a ella de forma voluntaria, ‘ lo que el resto serían despidos’, según indica el comité.
Con respeto a la suspensión del contrato –siempre a elección de la empresa un periodo de 15 meses con prestación de desempleo, ésta se convertiría en indefinida si los ingresos de 2013 de El País son inferiores a los del 2012, algo que tampoco convence a los representantes de los trabajadores, ‘que la plantilla estaría consumiendo paro sin saber si su baja se convertiría en despido en un año’.
Si la empresa no cambia el planteamiento en la reunión de mañana el periodo de negociación se cerraría sin acuerdo. Por lo que la dirección podría empezar a entregar las cartas de despidos hasta 149 personas. De ocurrir esto, el comité ha adelantado que presentará una demanda colectiva además de las individuales que entienden que el ERE no se ajusta a derecho y que no es necesario para la viabilidad de la empresa. ‘El ERE es injusto que no es necesario’, han apuntado. Explican que durante el prer trestre el periódico tuvo beneficios y que es verdad que el tercer trestre es malo, pero que según las informaciones que manejan la empresa prevé que cerrará el año en equilibrio sin beneficios, pero tampoco sin pérdidas. Y han apuntado para el próxo año El País prevé unas pérdidas de seis millones de euros la caída del consumo.
Una bajada de los ingresos que el comité consideran que se producirían en parte el recorte que El País quiere hacer en sus delegaciones. Aseguran que el Expediente de Regulación de Empleo afectaría en algunos casos al 80% de la plantilla de las regiones, lo que sería inviable mantener la información regional tal y como la conocemos hoy. Explican que El País siempre se ha diferenciado ofrecer una pluralidad de voces y de informaciones de toda la geografía española y con este ERE esto se perdería. ‘El objetivo es dar menos –información el mismo precio’, ‘se va a cercenar la información autonómica’ que con una reducción del 80% de la plantilla no es posible hacerla.
Con respecto al modelo de periódico que se quiere plantear con la reducción de un tercio de la plantilla, los representantes de los trabajadores han sido contundentes: ‘ese modelo no existe’. Afirman que la máxa de la dirección es reducir al máxo los costes, pero que no tienen en la cabeza un modelo de periódico.
Por otro lado, han asegurado que este ERE es algo más que un tijeretazo dentro de la plantilla de El País. Recuerdan que las condiciones de la plantilla de El País han sido el espejo en el que se han mirado el resto de empresas periodísticas, lo que entienden que si admiten el ERE, éste tendrá ‘un efecto pernicioso para toda la profesión’.
Apuestan que todos tiene que trabajar para sacar adelante el proyecto del periódico y recuerdan que el diario no nació para tener grandes beneficios, que El País ha sido una excepción. Por ello, han defendido su propuesta de ERTE, que plicaría a toda la plantilla, algo que la empresa no aceptó.
Este recorte en la plantilla se produce después de la salida de cerca de unos 80 trabajadores que han abandonado la casa en los últos dos años con acuerdos y prejubilaciones. Con respeto a la relación que en estos momentos tiene la redacción con el director, Javier Moreno, explican que es muy complicada. Esta tarde se concentrarán a las 18:00 horas en la Puerta del Sol.
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