Melchor Miralles no tenía buena cara el pasado jueves tras conocerse oficialmente el cierre de ABC Punto Radio. Miralles sabía hace semanas que la cadena cerraría, pero no fue hasta el miércoles que se enteró que no tendría cabida en los nuevos proyectos. Hasta esa fecha negociaba incorarse al diario ABC, pero finalmente tendrá que conformarse con una columna en el diario y quizás alguna participación esádica en los informativos de COPE. Miralles está muy decepcionado que se le prometió un proyecto de largo plazo que sólo ha durado poco más de un año.
La cara de Miralles en los pasillos de la sede de Vocento era un poema después de salir de antena el pasado jueves. El comunicador no encajaba todavía el fin de ABC Punto Radio y la certificación de que su corta carrera radiofónica llegaba a su fin. Miralles albergaba la esperanza de reubicase en COPE o en el peor de los casos en el periódico ABC. No obstante, las dos vías no se pudieron concretar y sólo se le ofreció ser columnista en ABC – mucho menos dinero y la posibilidad de encajar como colaborador en el informativo de mediodía que prepara Ángel Expósito en COPE.
COPE no quiere a ningún comunicador en su equipo como fruto del acuerdo con Vocento lo que la única posibilidad es precisamente reubicarse en el informativo del mediodía donde ya conocemos a su coordinador y presentador: Ángel Expósito. Y sólo sería con colaboraciones esádicas. En el caso de la posible llegada de Miralles al diario ABC, esta posibilidad ha ido perdiendo fuerza hasta quedarse en nada, después de que el equipo de Bieito Rubido rechazó la llegada de cualquier elemento externo de Punto Radio a su redacción.
Con estas posibilidades sobre la mesa y quizás algún cargo directivo en el aparato corativo que todavía no se ha concretado cercanos a Miralles comentan que se encuentra sumamente decepcionado con el cierre de la emisora ya que se le prometió un proyecto a largo plazo que finalmente se ha quedado en un año y medio. Pese a todo el balance que hace Miralles es positivo que han logrado situarse en el dial como alternativa a los grandes. Un reto personal que considera superado y que se ha visto truncado sólo los ajustes económicos de Vocento.
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