En estos momentos, un equipo de la Inspección del Trabajo se encuentra desplazada en las dependencias de Unidad Editorial, donde interroga a los becarios del Grupo. El objetivo de esta inspección programada, es comprobar que no se vulnera ninguna ley y que los estudiantes no realizan labores de un redactor contratado. Recordemos que en 2012 ‘El País’ fue multado con 160.000 euros la relación de trabajo ‘irregular’ que mantenía con los estudiantes en prácticas. En estos momentos, Unidad Editorial negocia su convenio único con los sindicatos, en el que pide una rebaja salarial del 10%.
La noticia se está produciendo en estos momentos: un equipo de la Inspección del Trabajo se encuentra desplazado en las instalaciones de Unidad Editorial en Avenida de San Luis en Madrid, interrogando a los becarios del Grupo. El objetivo es comprobar que no estén realizando labores de un redactor y que tanto no se vulneran las leyes laborales. La Inspección del Trabajo lleva unos meses visitando los medios de Comunicación fiscalizando a los estudiantes en prácticas dentro de procedientos programados y avisados con antelación.
El precedente más inmediato es la sentencia de 2012 contra ‘El País’, que tuvo que abonar una multa de 160.000 euros precisamente la irregular situación de los periodistas becados provenientes del Máster UAMEl País. Trabajo denunció que estos estudiantes eran utilizados para sustituir a redactores, pero manteniendo las mismas condiciones de la beca y sin contrato formal.
El Juzgado de los Social número 21 de Madrid fallaba en septiembre de 2013 que consideraba probada la existencia de una relación de trabajo irregular entre el periódico y sus becarios, ya que estos han prestado servicios ‘bajo la apariencia de una beca’ cuando su actividad, ‘de no desarrollarse los becarios’, tendría que hacerse personal laboral.
En el caso de ‘El Mundo’, la inspección es el paso previo a cualquier decisión. Una inspección que además coincide con la negociación del convenio colectivo único entre la empresa y los sindicatos. La prera propuesta fue rechazada los trabajadores. La empresa pide un recorte salarial del 10% y nuevas tablas salariales para los nuevos contratados.
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