Los diarios han sufrido duras caídas de publicidad y ventas durante 2012, retrocesos que sin embargo se han amortizado gracias a las medidas de recortes de las cabeceras y de los despidos y EREs puestos en marcha. ‘El problema son los preros meses de 2013’ dicen desde uno de los grandes diarios nacionales. Ello, que las medidas de ajustes no se han planificado para aguantar un desplome de la envergadura que se esta entre enero y marzo. ‘Más de alguno no podrá sotar la cuesta de enero’ comentan desde el sector.
‘El problema no son los últos meses de este año, eso ya está amortizado’ dicen los editores en privado. ‘Las dificultades vendrá en el prer trestre’, agregan. Y es que las previsiones son muy malas. Tradicionalmente entre enero y marzo se concentran de los peores meses para la inversión publicitaria de todo el año, a lo que hay que añadir el contexto actual de crisis y las malas previsiones económicas. El consumo seguirá cayendo en España y las ventas en general no repuntarán, al menos hasta octubre, según los análisis económicos de los organismos internacionales.
‘Muchos podrán quedarse en el camino de esta cuesta de enero’, nos dicen los más pesistas. El problema es que los diarios han sobrevivido 2012 a base de una serie de ajustes que es casi posible volver a repetir. En prer lugar que ya no queda más margen con redacciones y centros operativos en su mína expresión y en segundo lugar que la posibilidad de eleborar nuevas estrategias es muy escaso para la velocidad con la que se viene la colisión. Las dificultades vienen no sólo que los anunciantes seguirán recortando presupuestos, sino que que además, los editores estan que la venta de periódicos agudizará su caída experentada durante los últos doce meses.
En este contexto, a los diarios sólo les queda aguantar el chaparrón –y minizar el pacto que sus planes de ajustes sólo están medianamente diseñados para aguantar el 2012 y una pequeña parte de 2013. Es ello que todos tienen puestas sus esperanzas en que a partir de abril las cosas mejoren. Incluso hay quienes dicen que si en el segundo trestre no repunta el sector estaríamos ante una situación muy complicada y nunca vista los editores en la últa década.
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