He revisado mis agendas pero no encuentro la fecha. Hace unos cuantos años, siendo alcalde de Pozuelo de Alarcón Jesús Sepúlveda, quedé a comer con él. Tardé casi un año, o más, en cerrar nuestro encuentro, su dircom, que había sido anteriormente del que fuera ministro Álvarez Cascos, un tal Piñón, nos acompañó durante el almuerzo.
Yo recordaba al anterior alcalde, Crespo, que era el que había dado a los Corazonistas las licencias necesarias para vender una finca con un torreón, donde los curas nos daban de hostias de niños, e hicieron una zona de gran negocio, cines… Seguro que el exministro Gabilondo puso su mano sobre la venta y recalificación, o no…
Durante la comida me di cuenta de que el tal Sepúlveda era un alcalde trincón al uso. Había visto hacerse rico a Penit, a Huete de Valdemoro, a Granados, a Tejeiro, a Pedro Torrejón, a los de Aranjuez, a los de Seseña, al alcalde Payaso… Y el tufo, aunque disfrazado de Loewe, era el mismo. Olía a trinque los cuatro costados. Y sí quiero aclarar algo que lleva conmigo los últos 25 años: ‘Un alcalde en España, honrado que sea, se ha hecho rico, sólo con sus recalificaciones mil millonarias’. O es que alguien es tan tierno de pensar que los de la GÜRTEL les iban a hacer ricos. Le han pillado con dos viajes y cuatro duros. La verdad, nuestro dinero, ¿verdad Piñón? Está a buen recaudo en Suiza, al lado del de Bárcenas, Fernández el gallego, Huete el que tenía un hermano riquíso de familia… Alcaldes a los que han pillado llevándose millones de pesetas, de euros, de dólares… y dicen que ha sido la lotería. Yo jugaba con ellos y nunca me tocó ni el reintegro.
ESPAÑA necesita una verdadera regeneración. La clase política está muy tocada de escándalos y al final son nuestros bolsillos los que pagan el confeti de todas las fiestas.
ESPAÑA necesita darse la vuelta y meter en la CÁRCEL a todos los que nos han robado, hasta que devuelvan el últo euro. Y, en el caso de los empresarios que pagan en ‘B’, lo mismo, al talego hasta que se pongan a bien con la sociedad y con Hacienda (que somos todos).
Son miles los escándalos que nos acompañan, entre otros tener que escuchar que los productos GENÉRICOS son iguales o bio equivalentes que los de marca, ¡y una mierda! Cuando vayas a la farmacia pide la marca, que ellos investigan, no como los de MERCADONA… ¡PAÍS! En Europa llama la atención que hayamos pasado de ser la prera en investigación agroalentaria a estar, de nuevo, en la cola. Las grandes de Cataluña apoyaron las marcas blancas y hoy sus marcas no valen nada. Las grandes distribuidoras no mandan sus productos punteros para que no se los copien… ¿Se puede vivir así?
Por no hablar de Sanidad…
A VOLAR CON IBERIA…
pedro aparicio pérez
fontanero de la Comunicación
director de prnoticias.com