En el marco de la II Ágora de Neuroexpertos de Novartis, celebrado en Valencia, más de 150 médicos especialistas en Neurología de los principales hospitales españoles han destacado la tancia de las nuevas tecnologías en la investigación de la Esclerosis Múltiple (EM) y su traducción al ámbito asistencial. Los expertos destacan que con la llegada de los nuevos fármacos orales ha mejorado sustancialmente la calidad de vida del paciente y se han reducido los efectos adversos.
Mar Mendibe, neuróloga clínica, profesora de la universidad de País Vasco y responsable de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Hospital Universitario Cruces, afirma que ‘en los últos 26 años gracias a la mejoría de la asistencia médica y a la optización de técnicas como la resonancia magnética y otras pruebas complementarias, la investigación en la EM ha avanzado mucho más que en los 100 años anteriores. Y es lógico pensar que en base a las nuevas tecnologías, los distintos análisis de sangre, la identificación de marcadores biológicos, inmunológicos y genéticos, las distintas secuencias de resonancia magnética y otras técnicas como la Tomografía de Coherencia Óptica o los potenciales evocados, podamos mejorar la investigación de la EM’.
En este sentido, la Dra. Mendibe declara que ‘a día de hoy existen muchísas líneas de investigación en EM, todas ellas dirigidas, sobre todo, a mejorar el diagnóstico y el pronóstico de la enfermedad, buscando marcadores inmunológicos y genéticos que nos ayuden a detectar precozmente la patología y conocer su posible evolución”. Sin embargo, añade la Dra. Mendibe “sigue habiendo muchos retos de cara a la investigación y el tratamiento de la EM. Desafortunadamente actualmente no tenemos fármacos eficaces para todos los pacientes con EM, motivo el cual tenemos que pulsar los ensayos clínicos e investigar, ya que la investigación es nuestro futuro’.
Por su parte, Rafael Arroyo, jefe de la Unidad de Esclerosis Múltiple del Hospital Clínico San Carlos de Madrid y jefe de Servicio de Neurología del Hospital Universitario Quirón de Madrid, añade que ‘los avances en los últos 20 años han sido muy tantes, no sólo la epidemiologia de la enfermedad, que cada vez conocemos mucho mejor, sino también que hemos ido acercándonos a sus causas genéticas, a los factores etiopatogénicos y a las alteraciones de la inmunidad. Aun así, donde más se ha avanzado ha sido en el diagnóstico y el tratamiento, ya que a día de hoy disponemos de múltiples fármacos para poder tratar la EM’.
Retos de futuro en el abordaje de la EM
Otro de los temas analizados en la reunión hace referencia a los últos avances y los retos de futuro en el abordaje de la EM, haciendo especial hincapié en la mejora de los tratamientos, en términos de seguridad y eficacia, tal y como han mostrado recientemente los resultados del estudio FIRST sobre la últa novedad terapéutica Gilenya®. En este sentido, en palabras del Dr. Guillermo Izquierdo, jefe de la UGC de Neurología, Neurocirugía y Neurofisiología en el Hospital Universitario Virgen de la Macarena de Sevilla, ‘Gilenya® es un medicamento muy seguro a corto y medio plazo. Además de disminuir la agresividad inmunológica, puede actuar sobre mecanismos que producen daño neurológico irreversible y detener, al menos parcialmente, esos mecanismos de neurodegeneración’. Y añade que ‘además, tras más de 50.000 pacientes tratados con Fingolod durante varios años, algunos de ellos más de nueve, el riesgo de aparición de nuevos efectos adversos es cada vez menor’.
El Dr. Arroyo, quien ha moderado una mesa redonda en la que se han presentado y analizado tres casos clínicos distintos, ha añadido que ‘el reto del futuro es dirigirse poco a poco hacia un tratamiento individualizado, personalizado, de los pacientes con EM. Y para ello, es necesario conocer bien a los pacientes para poder elegir cada vez mejor los tratamientos, incluidos esas formas progresivas para las que aún no tenemos tratamientos suficientemente eficaces. De esta forma, en un futuro, la mayoría de los afectados serán controlados desde un principio y mejoraran su calidad de vida sustancialmente, ya que podrán ser diagnosticados precozmente y llevar una vida normal’.