El edificio del Servicio Extremeño de Salud (SES) de Mérida estuvo albergando, además de las oficinas de los servicios administrativos del SES, una sala de cine privada en las dependencias habilitadas para que los empleados de la empresa privada Pracon, que aquel entonces se encargaba de la seguridad en el edificio, identificasen al personal que entraba y salía del edificio. ¿La cartelera? Acción y nografía. Pero ésta no es la prera vez que Pracon se encuentra en el ojo del huracán.
‘La edición digital del diario HOY de Badajoz nos ha dejado a todos boquiabiertos; pensábamos que era una película de Almodóvar’, comentan desde Extremadura periodistas que ejercen sus labores en los gabinetes de prensa de las consejerías a las que hemos consultado. Todos coinciden en señalar los hechos de ‘extralilitación’. Y es que, el medio digital publicaba, a la vez que lo hacían otros como El Periódico de Extremadura o ABC, la sanción que confirmaba el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEX) de suspender de empleo y sueldo durante 30 días a un tero al que se le encontró material nográfico en su turno de trabajo, que era normalmente el fin de semana.
El trabajador que desempeñaba servicios de tero pertenece a la empresa Pracon (Prestación de Servicios Auxiliares Específicos y Concretos a Empresas S.L.), contratada el SES antes de que en 2012 empezara a llevar la seguridad EULEN. Un compañero alertó a los jefes de la empresa de que este empleado ‘no apuntaba en el libro de control la gente que accedía al edificio’ así como de otras irregularidades. Este aviso motivó que un inspector se presentara en el puesto de trabajo y corroborase las afirmaciones de su compañero: ‘no se apuntaba ninguna incidencia en su turno’.
Además se encontró en el lugar, cercano a su puesto de trabajo, ‘cartones en el suelo y periódicos como almohada, así como un lector de DVD con varias películas, que utilizaba para verlas, aunque no tenía permiso’. La propia empresa sancionó al trabajador ‘negligencia, deslealtad y abuso de confianza en el trabajo’. A ello, el tero interpuso recurso de suplicación al considerar que había habido ‘indefensión’ al no realizarse una prueba pericial que comprobase que la firma en unos documentos era la suya, pero la Sala considera la prueba ‘intrascendente’ y confirma la sanción de suspensión de empleo y sueldo de 30 días. El Consejero de Salud y Política Social del Gobierno de Extremadura, Luis Alfonso Hernández Carrón, explica que ‘hay dos guardas de seguridad en los servicios centrales del SES’, pero la Consejería ‘no tiene nada que ver’ con el caso que publicaba HOY.
Preocupación en Pracon las inspecciones de la Policía
En abril de 2010, la Crónica de Badajoz publicó otro caso de supuesta ‘extralitación’ de los empleados de Pracon. La propia empresa hizo público un comunicado de inquietud de los 105 trabajadores discapacitados que trabajaban allí ante las ‘numerosas’ sanciones administrativas propuestas contra Pracon el departamento de Seguridad Privada de la Jefatura Superior de Policía de Extremadura, ‘que los agentes entienden que estos trabajadores realizan labores de vigilancia privada sin titulación’.
Sin embargo, el empresario del centro que pertenece al grupo de Secoex que sí se dedica a la seguridad, Joaquín Rubiales, aseguró que estas personas realizan servicios externalizados, generalmente de teros, conserjes, así como labores de lpieza, que nada tienen que ver con la vigilancia. El delegado de UGT, José Antonio del Hoyo, detalló que las inspecciones policiales se suceden desde hace semanas y hay un expediente abierto, que aún no se ha resuelto, que podría conllevar hasta 30.000 euros de sanción a la empresa y 3.000 a los trabajadores. La Policía Nacional no respondió al diario de Badajoz.
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