La situación económica actual requiere de las empresas una profunda transformación. Esto exige, como míno, una revisión del foco en el modelo organizativo puesto que los empleados han pasado al prer plano convirtiéndose en protagonistas de esta evolución.
Con este nuevo marco, las políticas informativas pasan a ser estrategias de comunicación dirigidas al compromiso y engagement. Es entonces cuando la Comunicación Interna se hace prescindible y con ella, algunos elementos para conseguir el éxito en su plantación.
La base de una buena estrategia de Comunicación Interna es la absoluta necesidad de compromiso parte de los líderes. Las organizaciones demandan información vertical y horizontal, así como redes de colaboración, lo que exige un fuerte compromiso tanto de los directivos como de los mandos intermedios y una constante comunicación interna con las audiencias. En esta línea, los empleados deben convertirse en los verdaderos protagonistas, plicándoles en decisiones propias de la gestión para lograr la identificación y el compromiso con la empresa. El diálogo ha sustituido al discurso.
Las acciones de Comunicación Interna, las campañas de valores o de cultura corativa que se apoyan en planes vivenciales logran mover, provocar una reacción y conseguir objetivos mucho más que aquellas que se litan a trasladar información. Hay que vivir la experiencia de la marca. Y para ello, no podemos olvidar el poder del storytelling. En Comunicación Interna ya no es suficiente con informar asépticamente de los cambios, hay que dar un paso más y aplicar elementos narrativos para construir pequeñas historias que logren llegar a cada audiencia.
Otro de los aspectos a tener en cuenta a la hora de plantar con éxito la comunicación interna es la utilización de todos los recursos posibles para sorprender e plicar a los públicos internos, especialmente a través de medios audiovisuales. La Comunicación de pacto donde los grandes recursos del g reservados anteriormente a los targets externos y a la venta, son ya herramientas habituales para desarrollar el branding interno. Asismo, las organizaciones deben apostar la creación de redes sociales internas como nueva herramienta colaborativa para fomentar el networking, abordar una nueva gestión de conociento y anar los grupos de discusión.
En línea con la idea anterior, Be Mobile. Los nuevos dispositivos abren la puerta a la creación de APPs de Comunicación Interna que permiten llegar a todos los empleados independientemente de donde estén, de qué tipo de rol jueguen dentro de la organización y de cuál sea su puesto de trabajo.
Pero la plantación de estos principios básicos de la Comunicación Interna no sirve de nada si la empresa no se preocupa de garantizar su continuidad. La continuidad, con análisis periódicos de los resultados para consolidar o redefinir los pasos a seguir, es prescindible.
Ángel Andreo Pascual
Responsable del Área de Comunicación Interna de Inforpress
