La Asociación de Telefónica para la atención a las personas con discapacidad (ATAM) celebra su 40 aniversario, ocasión que ha aprovechado para hacer balance de sus cuatro décadas de historia y para desvelar los retos a los que se enfrenta la institución.
Navi Pillay, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos advirtió el 6 de marzo que el acceso al empleo, una garantía fundamental para la dignidad humana, es negado a millones de personas con discapacidad en el mundo. Sin embargo, hay empresas, creadas bajo el dictado de la solidaridad, que han dedicado su tiempo y sus esfuerzos a la integración de estas personas con discapacidad y/o dependencia. ATAM, la Asociación de Telefónica para la atención a las personas con discapacidad, lleva en ello 40 años.
Esta Asociación, que nació como una iniciativa altruista entre una empresa y sus trabajadores, ha evolucionado en función de las necesidades de las personas, sus condiciones y su entorno. Hoy, en su 40 aniversario, cuenta con casi 55.000 socios y más de 6 millones de euros al año para ayudar, gracias a las 35 empresas que forman el Grupo Telefónica, a estas personas y sus familias.
La Jornada de Apertura de la celebración del 40 aniversario de ATAM ha estado presidida José Mª Álvarez Pallete, Consejero Delegado de Telefónica, y Javier Clemente, presidente de ATAM. Además, ha contado con las intervenciones del secretario federal de Comunicaciones de UGT, Alfredo Mesa; el secretario general del Sector de Telecomunicaciones de CCOO, Jesús González; el presidente del Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad, José Luis Pérez Bueno; y el exdirector general de Recursos Humanos de Telefónica, Oscar Maraver.
Javier Clemente ha alabado el valor del proyecto y la labor desempeñada en los 40 años de historia. Y ha aprovechado para hacer un llamamiento a quienes tienen la responsabilidad de velar los derechos de las personas con discapacidad y dependencia en España. Ha recrinado: ‘No es justo que deban sotar la crisis en mayor medida los colectivos o personas que más necesidades tienen. Se aconsejaría ir más despacio hacia adelante, pero nunca hacia atrás’.
José Luis Pérez Bueno ha asegurado que ‘ATAM es un valor para no caer en la renuncia y la desesperación cuando el mundo es tan proclive a ello’. Ha explicado que ‘en estos momentos en los que miramos con desazón a representantes políticos y nos sentos desatendidos, ATAM es un apoyo valioso’. Por su parte, Jesus González ha hecho hincapié en que ATAM ha cubierto las necesidades de estas personas ‘antes de que existiera un sistema público de protección social y ha sido un elemento de igualdad, ya que la diferencia de recursos sociales que ha existido entre unas comunidades autónomas y otras la ha suplido la asociación en todos sitios igual’.
A este respecto, Alfredo Mesa ha manifestado que, aunque los fundadores de ATAM ‘buscaron crear tejido social en beneficio de los más desfavorecidos’, la Asociación sigue teniendo mucho hacer ahora, un momento en el que, ‘lamentablemente, la actual crisis económica evidencia que estamos destruyendo nuestro conociento de los derechos de las personas con discapacidad y dependencia afectando al sote que necesitan para vivir en condiciones dignas’.
José Mª Álvarez Pallete ha aludido a las diferentes etapas que ha experentado la actitud hacia la discapacidad: ‘desde la discrinación, la ignorancia, el abandono o la beneficencia’, hasta llegar al panorama actual, en el que ‘se han conseguido superar las barreras de la ignorancia y la invisibilidad y evolucionar hacia el respeto hacia la dignidad del Hombre’.
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