Prisa anunciaba ayer ante la CNMV que negociaba la enésa refinanciación de su deuda neta cifrada el Grupo en poco más de 3.000 millones de euros. Estamos hablando de un nuevo acuerdo bancario que podría significar la entrada de los acreedores en el capital de la compañía. No obstante, el problema actual de Prisa es un poco más grave: sin liquidez busca la manera de buscar un ‘salvador’ que pueda comprar activos y alivianar la deuda. En medio, la empresa sigue hundiéndose en Bolsa.
Prisa enviaba ayer la tarde una nota a la CNMV en que confirmaba que ‘existen conversaciones avanzadas con sus principales bancos acreedores de cara a la refinanciación de su deuda’. El consejero delegado de Prisa, Fernando AbrilMartorell, ya anunció durante la presentación de los resultados trestrales de la compañía que el grupo estaba negociando con los bancos para tratar de reestructurar su deuda bancaria neta, que en mayo el grupo cifraba en 3.004,61 millones de euros.
La empresa ha señalado que en caso de ‘concretarse un acuerdo se comunicará otunamente al mercado’. Durante la junta de accionistas celebrada en junio de 2012, AbrilMartorell presentó un plan para reducir la deuda neta del grupo en 650 millones de euros en dos años, que incluía la entrada en su capital de La Caixa, Banco Santander y HSBC, mediante la conversión de parte de su deuda en acciones 334 millones de euros.
No obstante, en el sector están convencidos de que estas acciones no serán suficiente para garantizar la viabilidad de Prisa, un objetivo que sólo se alcanzaría con la venta de algún activo tante como Santillana o Digital Plus. Los rumores apuntan a que Cebrián y su equipo intentan vender a marchas forzadas su 56% en Digital Plus, empresa que comparte con Telefónica (22%) y Mediaset España (22%). También se habla de la venta de su participación en Mediaset e incluso de alguna participación en Prisa Radio.
El problema para Prisa es que la venta de Digital Plus –que es la que al parecer cuenta con más posibilidades de materializarse significaría la salida de una de las principales máquinas de hacer dinero del Grupo. Los ingresos abonados significaron en el prer trestre un tercio de la facturación total de Prisa, además de ser uno de los pocos negocios que todavía no entra en pérdidas.
En cualquier caso, la intención de Prisa de vender activos está en el mercado desde hace más de un año, todavía sin un comprador claro. Y es que parece difícil que dado el actual contexto económico y de los medios, alguna gran coración tenga la liquidez suficiente para poder afrontar una compra de estas características y quedarse con la plataforma de pago de Prisa. No obstante, las fuentes consultadas pr indican que no se descarta alguna compra de una de las grandes del IBEX en los próxos meses.
Mientras, la acción de Prisa sigue desplomándose en Bolsa. Esta semana cayó hasta los 15 céntos después de permanecer en torno a los 22 durante un mes. A finales de esta jornada se acercaba a los 18 céntos, fruto del anuncio del acuerdo de la refinanciación de la deuda.
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