Todo está preparado para una hipotética mudanza que habría de producirse antes del 18 de julio para evitar el desahucio. Pero el prero en asegurarse de no pasar el mal trago ha sido el propio Julio Ariza, quien, entre ayer y el día anterior, abandonaba el edificio, en dirección al de Intereconomía Masters, en la calle Fortuny, junto al resto de jefes, financieros y Tesorería. El empresario no se iba sin antes prometerles el pago de dos nóminas.
Los empleados del Grupo Intereonomía veían con asombro como la cúpula directiva y los departamentos más delicados dejaban el edificio con todos ellos a su suerte sin saber, en la mayoría de los casos, cuál será el nuevo emplazamiento de su trabajo. Los de Radio Intereconomía efectuaran el cambio a Modesto Lafuente a lo largo del día e intentarán, de paso, seguir manteniendo las emisiones pese a que, una vez en las nuevas oficinas, deberán encargarse de colocar ellos mismos sus cosas, ordenador incluido, con la ayuda de un informático en el mejor de los casos.
La gente de la radio mañana empezará a emitir desde Modesto Lafuente donde también estarán los empleados de Administración. El despacho de Julio Ariza aparecía hoy sin cerradura y panel de códigos que, supuestamente, han sido arrancados para llevarlos a Fortuny. De él, ni rastro. Eso sí, antes de dejar las instalaciones, el propio Ariza hacía llegar a sus empleados un mensaje en el que les prometía, de nuevo, que cobrarían dos nóminas en los próxos días siendo una de ellas en esta semana (hoy es miércoles y ni rastro hasta el momento).
Ayer, durante el programa de Pedrerol, se producían cortes justificados como técnicos, cosa que, según ha podido saber prnoticias, sería posible las precarias condiciones en las que, tanto radio como televisión, están trabajando. A esto se une que los empleados de la televisión no saben cuál será su destino, pese a que están empaquetando sus cosas y equipos, pero nadie les confirma su destino aunque lo sitúan en la Ciudad de la Imagen.
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