La últa decisión del vicepresidente de la Comisión Europea y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, supondrá que España devuelva las ayudas concedidas a los astilleros mediante bonificaciones fiscales del llamado ‘tax lease’ recibidas entre el año 2007 y 2011. El montante de esta cifra asciende a más de 2.000 millones de euros que deberán asumir los inversores que financiaron la construcción de los buques aunque no armadores y astilleros.
El fiasco de Almunia hace peligrar 87.000 puestos de trabajo y atenta contra el futuro de un sector que podría verse abocado a la desaparición. El Comisario Almunia ha dado la espalda a realidad española, a sus congéneres, con una comunicación unidireccional en la que sólo ha prado su planteamiento, propio de Gobiernos totalitarios, sin mirar más allá de sus exigencias y sin atender a las razones de peso expresadas el Ejecutivo español.
No obstante, es obvio que esta medida afectará indirectamente a los trabajadores que se sienten hundidos Almunia. Además, el Comisario iba más allá en sus pretensiones al solicitar que la devolución de las ayudas fuera desde el año 2005 y no 2007 como ha sido definitivamente gracias al apoyo del Comisario Antonio Tajani.
El alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, presentará una propuesta en el pleno del Ayuntamiento pidiendo que se declare al Comisario Joaquín Almunia persona ‘non grata’. La pregunta obligada y para la que pedos ayuda a los lectores sería:
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