Fernando González Urbaneja ha estado en los micrófonos de Reteros #CRO haciendo una revisión de la dura actualidad del sector. Ya fuera de la Asociación de Prensa de Madrid (APM), se ha mostrado muy crítico con los editores de medios, con los políticos, el Gobierno y los propios periodistas. Los culpa a todos igual del ‘caos’ que actualmente está viviendo la profesión. En una extensa entrevista en los estudios de Onda CRO ha criticado además la escasa innovación de los medios producto de que la ‘profesión está profundamente mal concebida’.
Respecto de los problemas del sector sus críticas apuntan desde el comienzo del proceso formativo de los periodistas. ‘El problema es que no se ha sabido filtrar el paso la universidad de los periodistas. Nuestro gran error no hemos sabido elevar el nivel de exigencia de los profesionales de la información’, agrega.
En relación a la ‘concupiscencia’ de políticos y periodistas ha criticado el ‘encamamiento’ que ha perjudicado duramente a la prensa y a los políticos. No se dan ruedas de prensa con preguntas lo que a su juicio debería generar que los periodistas dejen de asistir a estas convocatorias. Incluso habla de organismos de ‘propaganda’ en relación a los servicios de Comunicación de Moncloa. Para Urbaneja un gran ejemplo de cómo funciona nuestro país en estos momentos.
Otro de los ejes de esta crisis de los periodistas tiene que ver con los propios editores de Prensa, que a su juicio son malos gestores que se han hecho con las riendas de los principales medios de Comunicación. ‘Gente que está en esto como paso a otras cosas’. Concluye indicando que se debería ‘inhabilitar la gestión de medios de Comunicación con la participación en otros negocios’.
En relación a los dos grandes editores de la prensa española Urbaneja tampoco ha eludido las preguntas. Preguntado Juan Luis Cebrián ha indicado que durante su periodo de editor en ‘El País’ y ‘Cinco Días’ fue ‘irreprochable’, aunque en su paso la planta noble de Prisa ha ‘fracasado como gestor’. En cuanto a Pedrojota Ramírez ha señalado que es un ‘fenómeno singular’, una persona ‘carismática y contradictoria’.
Finalmente y en relación a la oleada de más de 10.000 despidos de periodista desde 2008, se ha mostrado crítico e indica que se podría haber hecho mucho más para defender el empleo, incluso sacrificando salarios y tiempo de trabajo. ‘Ha sido un error monstruoso de los editores, sindicatos, asociaciones, pero también de los periodistas que han sido muy cobardes’, concluye.
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