Los consumidores españoles comienzan a recuperar la confianza en las empresas. Ésta es la principal conclusión que se desprende del estudio RepTrak® Pulse España 2013 dado a conocer la consultora Reputation Institute en un acto celebrado en la escuela de negocios IESE de Madrid esta semana.
Si bien la confianza en las empresas de nuestro país ha aumentado sólo muy tímidamente en 2013 respecto a 2012 –80 décas para el conjunto de las 100 empresas analizadas y poco más de 1.3 puntos para las diez compañías con mejor reputación–, se trata del prer incremento anual tras varios años de descensos continuos (la pérdida acumulada en el período 20102012 fue de casi 2.5 puntos). ‘Es evidente –afirma Fernando Prado, socio director de Reputation Institute España y Latinoamérica– que lo peor de la crisis económica en términos de daño para la reputación corativa ya ha pasado. Y aunque aún estamos lejos de los niveles reputacionales de 2010, cuando las diez empresas con mejor reputación superaron los 80 puntos (sobre 100 posibles), frente a sólo cuatro este año, la luz al final del túnel se ve con nitidez’.
No obstante, como apunta otra de las conclusiones del estudio, el perfil de reputacional de la empresa postcrisis difiere sustancialmente del precrisis. ‘El estallido de la burbuja financiera ha tenido profundas consecuencias en el perfil reputacional de las empresas’, explica Fernando Prado. La crisis ha restado protagonismo a la densión ciudadana de las empresas, su compromiso social en un sentido amplio, y ha potenciado la demanda de comtamientos íntegros, transparentes y éticos, y también de la competitividad basada en la capacidad de innovación de las empresas. ‘Céntrense en lo esencial, en la calidad de una oferta comercial innovadora, pero no se olviden gestionar sus empresas desde la ética y la transparencia como mecanismo para alcanzar resultados económicos sostenidos y evitar los desmanes corativos recientes, parecen aconsejar los consumidores a los gestores empresariales’, afirma Prado.
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