Las principales compañías de motores de búsqueda Google y Microsoft han acordado medidas para que sea más difícil encontrar ágenes de abuso infantil en la Red, una iniciativa que llega tras las peticiones del Gobierno británico sobre la protección de los menores en Intet.
Tras este pacto, cerca de 100.000 términos de búsqueda relacionados con materiales ilegales no producirán ningún resultado y darán lugar a advertencias en las que se dejará claro la ilegalidad de dichas ágenes.
En julio, el Ejecutivo británico solicitó a Google y Bing, que juntos representan el 95% del tráfico de búsqueda, que hicieran más para evitar que los internautas tengan acceso a este tipo de ágenes ilegales.
Ahora, ambas empresas han introducido nuevos algoritmos para pedir búsquedas de ágenes de abuso infantil, aunque expertos en protección de menores insisten en que la mayoría de este material está en redes ocultas.
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