Air Liquide colabora con la Fundación Juan XXIII mediante una donación de materiales para sus nuevas instalaciones, entre los que se encuentran cámaras frigoríficas, lavaplatos, cocinas, horno, planchas eléctricas, mesas y sillas.
La Fundación Juan XXIII es una entidad sin áno de lucro, que desde hace más de 45 años tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de las personas adultas con discapacidad intelectual y fomentar su integración social mediante la atención de diversos aspectos como el pedagógico, el terapéutico, el psicosocial y el socio laboral.
Air Liquide ha decidido realizar una donación de material a la Fundación Juan XXIII los valores que esta entidad representa y aplica. En este sentido, la compañía ha donado mobiliario y materiales para dos salas del centro. Por un lado, para el comedor de la Fundación que tiene capacidad para 150 personas. Por otro, para un espacio destinado al procesado y elaboración de cestas de frutas y verduras ecológicas que después son puestas a la venta a través de la página web. Mediante esta actividad, sépta dentro del conjunto de servicios que ofrece el Centro Especial de Empleo Ibergrupo, perteneciente al 100% a la Fundación Juan XXIII, se favorece la creación de empleo para personas con discapacidad intelectual.
‘Para Air Liquide, es una buena noticia saber que gracias a esta colaboración se ha agilizado la puesta en marcha del área de procesado y manipulación de los alentos que son comercializados el Centro Especial de Empleo. Los valores de la Fundación Juan XXIII están alineados con los de nuestra compañía, y colaborar en el fomento del empleo de personas con discapacidad nos permite reforzar nuestro compromiso con la sociedad’, explica Patrick Jozon, director general de Air Liquide España.
‘Lanzar una nueva línea de negocio siempre es complicado, y más teniendo en cuenta la coyuntura actual. La Fundación Juan XXIII, a través de su Centro Especial de Empleo Ibergrupo, sigue apostando la generación de empleo de calidad para personas con discapacidad y esto no sería posible sin la ayuda de empresas que como Air Liquide apoyan este tipo de iniciativas, mostrando así su compromiso y responsabilidad social’, explica Javier Arroyo, director general de la Fundación Juan XXIII.
