La negociación el nuevo convenio colectivo continúa. En estos momentos los representantes de los trabajadores han convocado a un referéndum para decidir si siguen las negociaciones o no. De lo contrario, la empresa ha recordado que su intención es utilizar todas las vías para sacar adelante esta reducción salarial. De momento, la empresa ha flexibilizado su postura inicial de un recorte lineal del 8,5% rebajando a un 6,25% el ajuste a los salarios menores a partir de los 22.000 euros y hasta los 30.000. Con todo, las negociaciones parecen se retomarán el 12, más lento de lo esperado.
La empresa pide un convenio único para todos los empleados de la empresa, además de una reducción salarial lineal para todos igual. La empresa establece en 22.000 euros el listón máxo para quedar exento de la reducción salarial, mientras que la propuesta de los sindicatos lo mantiene en 30.000. Se mantiene un ‘recorte lineal’ del 8,5% para la plantilla, aunque accede a una pequeña modulación (6,25%) para los trabajadores con salarios brutos anuales comprendidos entre 22.000 y 30.000 euros.
Por su parte, la comisión negociadora de los trabajadores propone una reducción progresiva según el salario bruto para los salarios superiores a 30.000 euros. Del mismo modo, quieren que se siga generando antigüedad a pesar de que se pasarán todos los trabajadores a una nueva empresa. Los trabajadores quienes además que no se produzcan despidos durante la vigencia del convenio. ‘En caso de producirse despidos individuales o colectivos se indemnizarán con 45 días con un máxo de 42 mensualidades’, indican.
Los trabajadores aceptan que el recorte salarial se convierta en una retribución variable, pero piden bajas voluntarias para los trabajadores que no acepten la reducción salarial con una indemnización de 45 días con un máxo de 42 mensualidades. También falta acercar posturas en la configuración de todos los grupos profesionales, las tabas y retribución, tiempos de trabajo, permisos y licencias y beneficios sociales.
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